La Corte Suprema de Estados Unidos bloqueó temporalmente la orden emitida por un juez federal de Texas que restringía el acceso a una píldora abortiva.
Previamente, la administración del presidente de Joe Biden había presentado un recurso de última hora ante la Corte Suprema solicitando que intervenga urgentemente para preservar el acceso a esta píldora, en otro giro en la batalla legal sobre los derechos reproductivos.
Al llevar el tema ante la máxima instancia judicial del país, la administración demócrata instó a congelar los fallos recientes que prohibirían o impondrían límites al uso del fármaco mifepristona.
"Las órdenes de los tribunales inferiores cambiarán el statu quo y alterarán el complejo régimen regulatorio que rige la mifepristona", dijo la procuradora general, Elizabeth Prelogar, en un documento de 47 páginas.
Y agregó: "Ese resultado disruptivo dañaría profundamente a las mujeres, al sistema de salud de la nación, a la FDA (la agencia estadounidense reguladora de los medicamentos) y al interés público".
En combinación con otro fármaco, la mifepristona se usa para más de la mitad de los abortos en Estados Unidos, y más de cinco millones de mujeres estadounidenses ya lo han tomado desde su autorización por parte de la FDA, el organismo que regula la medicina, hace más de dos décadas.