Misil de Cristina al Presidente: lo igualó a Macri por su apego al FMI

Por Hugo E.Grimaldi para LA GACETA.

FOTO DE ARCHIVO / TYC FOTO DE ARCHIVO / TYC
17 Mayo 2023

Fiel a su estilo, sin ningún tipo de autocrítica, en el centro del mundo y separándose de toda responsabilidad de la gravísima situación socio-económica actual y de la que le cabe a sus dos gobiernos anteriores (“la pérdida de la Democracia económica comienza a partir del año 2016”), con duros golpes hacia la Corte y los medios y con una crítica ideológica de mucho peso al presidente de la Nación en relación al FMI y a por qué, como Mauricio Macri, no puede presentarse como candidato, Cristina Kirchner suscribió una extensa carta pública de victimización y movió el avispero.

La misiva está dirigida esencialmente al Frente de Todos y fue presentada como un renunciamiento a la pretensión del kirchnerismo para que ella sea la candidata en las próximas elecciones. Podría decirse que es letra para la tropa más fiel, la que cree todo a rajatabla para que tome nota y difunda, pero fuera de allí la carta tiene profundos baches. Su argumento central, que llegó para ratificar menciones previas, fue una suerte de conjetura que forzó al máximo. Para ella, de presentarse será proscripta: no quiero ser “mascota del poder”  ni quedar a merced de jueces “perversos”, expresó.

Tras leer y releer el párrafo donde no lo nombra pero lo alude sin dudas, es probable que Alberto Fernández esté caminando ahora mismo por las paredes. A medida que pasan las horas, debe estar calibrando el doloroso golpe que le endilgó su ex mentora. Según Cristina, él y Macri son de la misma calaña, tanto que ninguno de los dos (se supone que por el mismo motivo) conserva hoy “aptitud electoral”. No es algo “casual”, pontificó Cristina y lo hizo responsable al Presidente de ser quien ha vuelto a pactar con el FMI para que tome “el timón de la economía argentina”, imponga su programa económico y se dispare “otra vez el proceso inflacionario sin control en la Argentina”.

En la carta ésa es quizás la parte más dramática, porque la vice denigra tanto al Presidente que lo mete en el mismo barro que a su antecesor. De nada vale que cada vez que puede Fernández lo haga jirones a Macri; para Cristina son iguales, culpables de lo que ella no quiere hacerse responsable, ni siquiera de haber autorizado a Martín Guzmán ir al Fondo. No lo dijo, pero la velocidad de la bola es probable que impacte a tres bandas en Sergio Massa.

El ministro de Economía está muy metido con el FMI porque sabe que es único prestamista que le queda a la Argentina. Y como es el de última instancia, por ese motivo ha hecho algunos deberes con los Estados Unidos en el tema telefónico y ha contrariado a Huawei, la empresa de China que quiere quedarse con la telefonía 5G. En paralelo a su ministro, el Presidente se reunió con empresarios de ese país que quieren manejar la Hidrovía Paraná-Paraguay, un resorte estratégico de primera magnitud por lo económico y por las negocios de todo tipo que se pueden montar allí con la mercadería que se transporte por los ríos. ¿Policía bueno-policía malo? ¿Estrategia o chapucería?

Todo es posible en un Gobierno que luce colgado de las cuerdas, más todavía desde el lapidario 8,4% de inflación de abril y de los verborrágicos anuncios que hizo Economíia de modo desprolijo durante el fin de semana, algunos de ellos incongruentes sin pie ni cabeza, otros sin chance de que salgan bien y otros más contrariando la tradicional defensa de la sustitución de importaciones. Traer mercaderías con arancel cero es mala palabra para el ideario peronista y más aún cuando le pega fuerte a los pequeños productores de fruta y verdura que surten al Mercado Central.

Este Mercado bonaerense ni tiene permiso, ni tampoco expertise para importar y si lo consigue, poco podrá hacer en la distribución ya que es probable que las cantidades compradas, seguramente en países vecinos, se agoten en la Capital Federal y el Conurbano. Pero, además, si el Banco Central no tiene dólares para que las empresas compren insumos para producir, cómo gastar lo que no hay. El nivel de actividad se resentirá fenomenalmente.

La City le ha clavado a Massa un sambenito peor que lo que dejó entrever Cristina: es un “vende humo”, dicen mientras el dólar de todo tipo aguanta contra las cuerdas de una devaluación que algunos juzgan inexorable. Lo que Massa no inspira en los agentes de mercado es la necesaria confianza que se necesita para salir del dólar e ir a la tasa, la típica bicicleta que se intentó instalar con la suba de rendimientos del fin de semana, zanahoria que además generará más emisión y más déficit cuasifiscal, mientras se bajan intereses de los Ahora 12 y los bancos buscan caminos para no perder plata.

Con esta carta de Cristina, en el Frente de Todos ahora se piensa con mayor firmeza en las PASO, algo que Massa dijo que él no podría avalar porque implica una “pérdida de tiempo, peleas estériles que sólo resuelven vanidades políticas”. Es decir que si no se siente tocado por la carambola que parece haber disparado la vicepresidenta y si hay finalmente internas en el FdeT, él se habría bajado de la carrera. ¿Es tan así? Tres meses atrás, Massa pensaba que  era “incompatible” ser ministro y candidato. A sus idas y vueltas, el mercado también le ha tomado el tiempo.

Comentarios