03 Julio 2023
La Selección argentina U-19 se despidió del Mundial de Hungría de básquet con el mejor cierre posible: ganándole 87-81 a Serbia, una escuela formativa de talentos internacionales, y alcanzando un quinto lugar que representa la mejor actuación de un seleccionado juvenil en 12 años (es la posición más alta desde el cuarto lugar en Letonia 2011). Aunque lo más destacable es el gran nivel individual y colectivo que exhibió el equipo nacional frente a los serbios, a los que derrotó por primera vez en la historia del certamen. Los 11 jugadores tuvieron minutos de acción y cinco de ellos aportaron doble dígito de puntos, entre ellos los 18 de Lee Aliya y los 15 de Dylan Bordón.
El seleccionado dirigido por Mauro Polla fue de menos a más a lo largo del torneo, y cerró su participación con una foja de cuatro triunfos (Corea del Sur, Brasil, Canadá y Serbia) y tres derrotas (Turquía, Hungría y España, a la postre campeón). Argentina mejoró en todos los aspectos, se metió en la élite y compitió de igual a igual con grandes equipos. Fue una gran experiencia en el proceso de formación para un grupo de jugadores que tiene margen para seguir creciendo. Más allá del resultado, que es anecdótico en categorías formativas, los chicos sumaron roce contra rivales de jerarquía y una enorme experiencia para su desarrollo individual.
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