La banca más grande Estados Unidos, J.P. Morgan, realizó un informe sobre la Argentina en el que abordó la inflación y sus proyecciones son más optimistas que las de algunas consultoras locales. No obstante advirtió la importancia de un marco de políticas sólido y la liberación de controles de capital para lograr una desinflación sostenible.

Señaló que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de septiembre, de un 3,5% mensual, fue un número que estaba en línea con sus expectativas. Según J.P.Morgan,  este descenso fue impulsado principalmente por una baja en los precios de los alimentos, "la reducción del impuesto PAIS y una desaceleración en los precios regulados".

Este dato le resultó alentador dentro de un contexto en el que la inflación anualizada sigue superando el 200%. La métrica preferida de J.P Morgan, que excluye los precios de alimentos, se ubicó en 3,7%, la más baja en casi dos años, lo que refleja una tendencia positiva. "Pero aún insuficiente para asegurar una estabilización completa", advirtió.

A pesar de esta reducción en el costo de alimentos, "otros sectores mostraron comportamientos mixtos. Los muebles y equipos para el hogar, sensibles a las importaciones, registraron un aumento moderado del 2,7%, mientras que la ropa y el calzado mostraron un incremento significativo del 6,9%, reflejando una aceleración en algunos bienes no regulados", indicó.

Hacia finales del año, las proyecciones del banco de Wall Street son más optimistas que las de algunas consultoras del país. Por ejemplo, el último informe de Econviews prevé una dinámica de precios del 3,5% para octubre y noviembre, y del 6,5% para diciembre. En cuanto a los primeros meses de 2025, la consultora de Miguel Kiguel estima una inflación en torno al 4% para el primer trimestre y del 3% para el último trimestre del año, según informó Ambito.

En tanto, J.P. Morgan prevé que la inflación mensual promedie 3,7% mensual en el cuarto trimestre de 2024, asumiendo un modesto repunte a fin de año y principios de 2025 debido a la transición hacia un nuevo marco de políticas y la unificación del mercado cambiario, en línea con otras consultoras locales. "Esto es consistente con nuestra previsión de inflación para diciembre de 2024 en 125% interanual", dijo.

Para 20225, y en un escenario de programa de estabilización y un régimen cambiario sostenible que genere un shock de credibilidad, "vemos espacio para que la inflación se desacelere a un nivel promedio del 2% mensual a lo largo de 2025, lo cual es consistente con una inflación de fin de año en 2025 del 35% interanual", proyectó J.P Morgan, a la  vez que advirtió: "enfatizamos que continuar con los ajustes de precios relativos y avanzar hacia la liberación de los controles de capital son dos condiciones necesarias para consolidar un camino de desinflación sostenible hacia adelante".