Primavera, colores, flores y un espectáculo celestial, el equinoccio de septiembre estuvo signado por una jornada mística donde se combinó el cambio de estación con un eclipse solar parcial que dejó imágenes asombrosas sobre la interposición de la Luna entre el Sol y la Tierra.

El 21 de septiembre, la llegada de la primavera vino con un regalo más, el eclipse solar parcial profundo que por sus particularidades lo consagró como uno de los más fascinantes de la década. Por la ocasión, la Luna cubrió alrededor del 80% de la superficie solar.

¿A qué hora ocurrió el eclipse?

El eclipse solar parcial se produjo específicamente sobre algunas áreas del hemisferio sur, en lo que fue la Antártida, el Atlántico, el Pacífico, la costa este de Australia y parte de Nueva Zelanda, regiones que pudieron ver con claridad el evento. En nuestro país así como Uruguay y Chile ocurrió a las 14:29 por lo que no era posible disfrutarlo a simple vista.

De manera completa, el segundo y último eclipse del año tuvo una duración aproximada de cuatro horas y media. Indicado en horario universal, el inicio de la fase parcial fue el 21 de septiembre a las 17:29:43 (TU). Mientras que el momento máximo del eclipse se dio a las 19:41:59 (TU), que en Argentina fue a las 16:41.

¿Dónde pudo verse con claridad?

En Nueva Zelanda se pudo ver un eclipse fascinante durante el amanecer del 22 de septiembre. El porcentaje de cobertura dependía de la ubicación y varió entre el 60% y el 73%, según indicaron desde Clarín. Por su parte, las islas y estaciones en la Antártida vieron las mayores fracciones de ocultación.

Ciudades como Auckland, Wellington y Christchurch registraron fases parciales con fracciones relevantes del disco solar ocultas, mientras que áreas como Tuvalu, Samoa y Fiyi observaron un eclipse parcial de menor magnitud. En Australia, el eclipse se vio mejor desde Macquarie Island, con casi el 80% del Sol oculto en el máximo. Mientras que la parte continental del país quedó en gran parte fuera de la trayectoria del eclipse.