Este sábado desde las 15.30, San Martín saldrá al césped del “Malvinas Argentinas”, en Los Polvorines, con la misión de ganar; aunque también deberá esperar. Será visitante de San Miguel en un partido que concentra todas las miradas, porque no sólo define el cierre de la fase regular, sino también la posición en la que el “Santo” ingresará al Reducido. Los hinchas lo saben: toda su pasión está puesta en el equipo, pero al mismo tiempo estarán atentos a lo que ocurra en otras canchas, donde jugarán rivales directos que pueden alterar la tabla y el futuro.
Con Deportivo Madryn ya asegurado como primero de la zona A y Atlanta consolidado como escolta, los puestos que se pondrán en juego son del tercero al octavo. San Martín llega séptimo, con 48 puntos y una diferencia de gol de +3. Por delante aparecen Tristán Suárez y San Miguel con 49, y en el mismo pelotón Gimnasia y Tiro y Patronato, ambos con 48 pero con mejor diferencia de gol. La cuenta es sencilla: si gana en Los Polvorines, el “Santo” puede superar a varios de sus rivales, siempre que alguno tropiece, claro.
Los hinchas, además de seguir cada pelota en Buenos Aires, estarán atentos a tres canchas más. En primer lugar, lo que ocurrirá con Tristán Suárez en el “Centenario” (la casa de Quilmes), que si no suma de a tres puede quedar al alcance de San Martín; pero también a las presentaciones de Gimnasia y Tiro en Córdoba y Patronato en Caballito, que hoy comparten puntos con el “Santo” y pueden ser superados si no logran ganar. La combinación de resultados puede reacomodar por completo la tabla y darle a San Martín la posibilidad de entrar al Reducido con localía y ventaja deportiva.
Ese es el punto central del reglamento: en la primera fase del Reducido, los cruces son a partido único, en la cancha del mejor ubicado, y en caso de empate ese equipo avanza por ventaja deportiva. En cuartos y semifinales, además, se juegan series ida y vuelta, siempre con la ventaja para el que haya terminado más arriba en la tabla. Para los hinchas, eso significa que el partido de hoy vale mucho más que tres puntos: puede cambiar de raíz el modo en el que se empieza a transitar el sueño del ascenso.
“Ojalá que no sea la última de local, que quede un tiempo más. La idea es cerrar el torneo lo más alto posible y después encarar el Reducido”, explicó Mariano Campodónico en la previa al duelo contra San Miguel.
El entrenador insistió en que la posibilidad de meterse entre los cuatro primeros todavía está abierta si la fecha juega a favor. “Hay dos equipos que juegan de visitante y tienen partidos complicados. Tenemos la esperanza de meternos entre los cuatro, y si no, saber que igual tendremos ocho partidos como todos. La diferencia es que, del quinto puesto para abajo, definís de visitante y con ventaja deportiva para el rival. Pero hay que afrontar lo que venga”, aseguró.
En la misma línea, Matías García reflejó lo que sienten los hinchas: que el partido en Los Polvorines es más que un trámite. “Sí, es un partido muy importante para nosotros porque va a definir muchas cosas. Tenemos que buscar los tres puntos, pero con paciencia, porque ellos también son un equipo duro, que se hace fuerte en su cancha. Igual, lo más lindo viene ahora: el Reducido”, analizó.
El volante también marcó que este encuentro funcionará como un examen antes del mano a mano decisivo. “Es una buena medida. Ellos tienen buenos jugadores, jerarquía y, en su cancha, se hacen muy fuertes. Entonces nos sirve para saber dónde estamos parados”, explicó el ex Güemes, que pidió mirar hacia adelante, sin lamentos por lo que ya pasó. “Las oportunidades ya pasaron, lo que pasó quedó atrás. Hoy nos enfocamos en lo que viene. San Miguel es un rival difícil, pero el Reducido es otro torneo: es mano a mano, no dependés de otros resultados. Son 90 minutos en los que el que se levanta mejor, pasa”, agregó.
Los hinchas lo entienden: mañana el equipo debe mostrar carácter de visitante, en una cancha difícil, y a la vez confiar en que en otras canchas se den resultados que lo empujen hacia arriba. Mientras el aliento se concentrará en Los Polvorines, la atención también estará puesta en el “Lechero”, San Miguel, Gimnasia y Tiro y el “Patrón”. Cada gol ajeno puede ser un empujón para soñar con un Reducido más favorable.
El desenlace será a pura adrenalina. San Martín no juega sólo: toda la zona A juega con él. Y este sábado al final de la tarde, los hinchas sabrán si su equipo encara el Reducido como protagonista con ventaja deportiva, o si deberá remarla desde atrás en busca del ascenso.