El estudio realizado por la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (Eeaoc) muestra la distribución departamental de la superficie cultivada en Tucumán con trigo y con garbanzo en las campañas 2024 y 2025, y la variación del área entre ambos ciclos.

En los dos cultivos se incluyen sólo los departamentos con más de 800 hectáreas cultivadas en las campañas analizadas.

La superficie implantada con trigo a nivel provincial registró en 2015 12.180 hectáreas más que en 2024; un aumento del orden de un 13%.

El análisis de la variación del área triguera en los departamentos con más de 14.000 hectáreas cultivadas indica aumentos de superficie en todos los casos, a excepción de Leales, que mostró un decrecimiento de 560 hectáreas (3%). Los mayores incrementos en hectáreas se dieron en los departamentos del sur de la provincia -Graneros, Cruz Alta y La Cocha-, con respectivos aumentos de 5.770 hectáreas (61%), de 3.400 hectáreas (32%) y de 2.020 hectáreas (11%).

En cuanto al garbanzo, se advierte una disminución de la superficie implantada, en relación a la campaña 2024, de 6.700 hectáreas; un 38%. El detalle por departamentos con más de 800 hectáreas implantadas con este cultivo revela descensos y aumentos del área. En Burruyacu y Graneros se retrajo la superficie garbancera en 6.970 hectáreas y en 840 hectáreas, respectivamente -el 58% y el 51%, por caso-. En La Cocha, Cruz Alta y Leales se detectaron aumentos de 790 hectáreas, de 240 hectáreas y de 210 hectáreas, en cada caso -equivalen a aumentos de un 40%, de un 32% y de un 24%, respectivamente-.

Resulta importante también mostrar la tendencia del área cultivada con trigo y con garbanzo en la última década.

Respecto del trigo, la serie se inicia con una tendencia alcista, que se mantiene hasta 2017, año en que se registra el máximo de la serie (121.750 hectáreas). En 2018 se produce una marcada reducción de la superficie (40%) que coincide con la predominancia de suelos con bajos perfiles de humedad al inicio de campaña. En 2019 se observa un leve aumento (23%); en 2020 se da otra caída (7%), mientras que en 2021 los valores prácticamente fueron similares a los de 2020. En la campaña 2022 se constata un nuevo decrecimiento de la superficie cultivada (20%), llegando al valor mínimo de la serie (66.030 hectáreas). En 2023 se detecta un aumento (23%), tendencia positiva que se mantiene en 2024 y en 2025, con incrementos interanuales de un 14% y de un 13%, respectivamente.

Garbanzo

En cuanto al cultivo del garbanzo, la serie también se inicia con una tendencia creciente que se mantiene hasta 2018. En 2019 se detecta un importante decrecimiento (31%), respecto al ciclo precedente; mientras que en 2020 y en 2021 se aprecian leves incrementos en relación a sendas campañas anteriores. En 2022 se repite un decrecimiento de un 4%, en tanto que en 2023 se constata un importante aumento de un 39%. En 2024 se registra un leve incremento, alcanzando el máximo del período analizado, mientras que en 2025 se observa una importante merma (38%), valor que corresponde al mínimo de la serie analizada.