SALTA.- Nadie presenció los terribles homicidios de Cassandre Bouvier y de Houria Moumni, las turistas francesas que fueron halladas a la vera de un camino de la Quebrada de San Lorenzo el 29 de julio. Sin embargo, los investigadores hallaron varios "testigos mudos", como se denomina a las huellas que dejan los asesinos en la escena del crimen.
Estas pistas, ahora, están resultando clave. Ayer, la Justicia salteña dio a conocer oficialmente que Moumni tenía bajo las uñas restos de piel de Santos Clemente Vera, uno de los imputados en el caso. Además, se confirmó que Gustavo Lasi, otro sospechoso, abusó de ambas turistas antes de que fueran ejecutadas. Por otra parte, no se detectó material genético de Daniel Vilte Laxi, el tercer procesado.
Los resultados de las pruebas genéticas llevadas a cabo en la Universidad de Buenos Aires fueron dados a conocer por el vocero del Poder Judicial salteño, Marcelo Báez.
Los nuevos estudios revelan que existían rastros seminales de Lasi tanto en el cuerpo de Bouvier como en el de Moumni, mientras que en el primero de los cadáveres también se hallaron restos genéticos de la piel de Vera, lo que confirmaría su participación en el crimen.
Los primeros estudios genéticos habían confirmado que Lasi había violado a Moumni; el imputado, de 24 años, había declarado que Vera y Vilte lo habían amenazado con un arma de fuego para que consumara el aberrante delito. Sin embargo, los últimos informes echaron por tierra esta versión.
Moumni (24) y Bouvier (29) desaparecieron el 15 de julio mientras realizaban una caminata en el paseo turístico, a 12 kilómetros de la capital salteña. Los cuerpos fueron encontrados dos semanas después; las pericias demostraron que fueron brutalmente violadas, y ultimadas con una carabina que ya fue secuestrada por la Policía.
Las jóvenes fueron atacadas el mismo 15 de julio por los tres imputados, en el momento en el que, aparentemente ebrios, volvían de cazar. Además, hay otras personas imputadas por encubrimiento. (NA-Especial)