BUENOS AIRES.- La falta de ajuste de la escala que determina las alícuotas a aplicar a los trabajadores en relación de dependencia para el pago del impuesto a las Ganancias y de las deducciones hoy resultan tan difícil de sostener como la desactualización del mínimo no imponible por el que tanto pelean los sindicatos. La AFIP sigue tomando parámetros desactualizados para realizar el cálculo del impuesto, ya que no condicen con los efectos de la inflación de los últimos años. Y no sólo eso, sino que los valores que se usan son tan ridículos como muchos de los números que publica el Indec.
Para determinar la cifra de Ganancias que debe pagar un trabajador, la AFIP toma los ingresos que tiene la persona durante un año y le permite deducir determinados gastos. Entre esas deducciones están los gastos que debe afrontar para el mantenimiento de sus hijos. En este caso en particular, la AFIP permite deducir como egresos por cada uno de ellos un importe de $ 600 mensuales. Esta cifra implica que una persona debería afrontar los gastos de comida, salud, educación, vestimenta y transporte de cada hijo con sólo $ 20 diarios. Tanto el importe a deducir por hijos como el mínimo no imponible se han actualizado sólo dos veces en los últimos cuatro años y por tan sólo 44%, similar a la inflación del Indec. Sin embargo, la real duplica ese porcentaje.
Con la escala que se utiliza para determinar la alícuota del impuesto pasa lo mismo: no hubo ningún ajuste de importes en los últimos 12 años, lo que provoca que cada vez más empleados tengan que pagar alícuotas más altas, hasta llegar a un espeluznante 35%. El hecho de usar valores irrisorios para los gastos que permite deducir la AFIP y la no actualización de las escalas, obliga a pagar un impuesto muy superior a lo que se debería abonar si se realizara el ajuste por inflación. Esto sube la carga tributaria de todos los ciudadanos.
Luego de un año en el que la economía estuvo estancada, sería bueno actualizar no sólo el mínimo no imponible, sino también las deducciones y la escala que determina la alícuota. Esta actualización debería ser lo suficientemente importante como para compensar lo desvirtuado que han quedado estos números debido a la alta inflación acumulada. Así, un ajuste de los importes utilizados para el cálculo de Ganancias le incrementaría el ingreso de bolsillo a casi dos millones de trabajadores.(DyN)