Asimiló el golpe y le disgustó hacia dónde apuntaron el ataque. La denuncia formulada por el diputado nacional Juan Casañas (UCR), en contra de Sara Alperovich, la hija del gobernador, José Alperovich, fue tomada con indignación por el titular del Poder Ejecutivo (PE). "Yo creo que se pasan la raya; se pasan de la raya. Bueno, pero qué se va a hacer. Esto es (por) lo que uno muchas veces se pregunta si sirve dar la vida por esto (por la política), cuando se meten de por medio a los hijos (sic)", analizó ayer en rueda de prensa.
Casañas estuvo el martes en la redacción de LA GACETA para presentar documentación que -según afirmó- probaría que la hija del gobernador le facturó unos $ 669.000 del PAMI por prestaciones médicas, desde septiembre de 2011. Al defender a su hija, Alperovich ni siquiera mencionó al diputado radical. Pero dejó en claro su disgusto. "Mi hija es mi vida. Es el sueño de mi vida. Es odontóloga, trabaja (y) tiene derecho a trabajar. Tiene cinco consultorios donde tiene a cinco profesionales, y dos empleadas administrativas. En el contrato por el que ella trabaja, creo que tiene una entrada de $ 36.000 por mes. No sé dónde esté lo malo de esto, la verdad que no lo entiendo. No la puedo privar a mi hija de que trabaje porque es una profesional. No la puedo privar de eso", retrucó.
Aunque no fue nombrado por el gobernador, el diputado Casañas salió al cruce de los dichos de Alperovich. "Está equivocado. No cuestiono el derecho de su hija a trabajar, lo que repudio es que ella haya obtenido un contrato millonario por el solo hecho de pertenecer a la familia gobernante. Los tucumanos estamos cansados del nepotismo de una gestión que hace uso y abuso de los recursos públicos para beneficio personal", insistió el radical, que aspira a ser reelecto este año.
"Hay una confusión permanente entre lo público y lo privado. Alperovich, y la presidenta Cristina Fernández, creen que el Estado es su concesionaria. Todas las oficinas públicas y el Partido Justicialista están al servicio de las familias del poder", añadió Casañas. Luego, advirtió que pedirá informes sobre el manejo de las cápitas del PAMI por parte de la clínica que administra Sara Alperovich.
Con tono político
"A pesar de que te ponen tantos palos en la rueda, las denuncias y los golpes bajos, creo que la mayoría de los tucumanos nos está apoyando", reforzó Alperovich.
En este contexto, el titular del PE aprovechó la ocasión para enviar un mensaje a quienes pretenden sucederlo en el sillón de Lucas Córdoba. "En estos 10 años pagamos los sueldos en tiempo y forma. Ya tenemos la plata reservada para pagar el aguinaldo, y ojo que es plata que teníamos, sin sacar créditos y sin utilizar los fondos de la Caja (por los $ 172 millones del fondo de Garantías de la Caja Popular de Ahorros). Esto no se daba en Tucumán, que era una provincia endeudada e inviable", dijo.
"El gobernador que venga ya no puede volver atrás. Ya no podrá dejar de pagar los sueldos, no podrá dejar de hacer obras, que es lo que busco como gobernador. Si estoy dejando la vida en esto y permitiendo que la basureen a mi hija o que hablen mal, es porque busco que Tucumán despegue definitivamente y que no vuelva a ser el Tucumán de antes", afirmó. "Tenemos que luchar en esta elección para que Tucumán siga adelante y complete este ciclo", arengó.