A la vieja usanza de los grupos tradicionales nacidos en la década de 1950 que marcaron una época (Los Fronterizos, Los Chalchaleros, Los Cantores del Alba, Los del Suquía)), Los Coyuyos de Tucumán rescatan esa impronta para hacerla suya. El grupo, integrado por Pablo Alderete (tenor y 1° guitarra) Gustavo Arévalo (tenor alto y bombo), Darío Trejo (barítono y 2° guitarra) y Pablo Acosta (barítono y guitarra), nació hace una década en el glorioso Colegio Nacional "Bartolomé Mitre", y ha recorrido escenarios de Santiago del Estero, Salta, La Rioja, Córdoba y ha sido distinguido en los festivales de El Queso (Tafí del Valle), La Empanada (Famaillá) y en La Chaya, de la Rioja. En 2007, debutaron discográficamente con "Para Tucumán", placa que tuvo éxito de venta, abordando temas de Yupanqui, Roberto Ternán y el Chango Rodríguez, entre otros. "Raíz que perdura" se titula su segundo registro en el que recorren diecisiete piezas que alternan entre los clásicos con algunos actuales con perfume romántico. Cuentan con la apoyatura de muy buenos músicos, tales como Víctor Juárez (un bandoneón decidor), María José D'Mari (un violín cantor), Francisco Santamaría en guitarra, Federico "Cuchi" Correa en bombo legüero, Eduardo Issa Osman en percusión, Cristian Isasmendi en bajo y Fabio Ávila en charango. Rescatan temas poco frecuentados en la actualidad como "Cuando vos quieras", de Eladia Blázquez, "Para ir a buscarte", de Ariel Petrocelli y Daniel Toro, "El dominguero" (Oscar Valles), "Chayita del vidalero" (Ramón Navarro), "Zamba del grillo" y "Burruyacú" (Tal vez un día busque tu sombra y allí descanse bajo una cruz, mientras la luna pasa besando tus chañarales, Burruyacú), de Yupanqui. El CD cierra con una zamba dedicada a la Virgen de la Merced. Sería interesante que el grupo también incursionara en el rico repertorio de autores tucumanos (Valladares, Costello, Cruz, Hoyos, Soria, Guaraz, así como Gentilini y Los Hermanos Núñez, radicados en la provincia). Con arreglos sencillos, prolijos y melodiosas voces, Los Coyuyos tienen un estilo ideal para los festivales y merecen la mejor de las suertes.
Los Coyuyos de Tucumán: un cuarteto con calor festivalero