Apenas concluida la primera jornada del Programa de Formación de Auxiliares de Vigilancia Fitosanitaria que la Eeaoc encara actualmente con el Ministerio de Educación de la provincia, Gerardo Gastaminza, jefe de Zoología Agrícola de la centenaria institución, destacó la importancia que hoy reviste el refuerzo de la capacidad de monitoreo para la prevención del HLB en territorio nacional.

"Impedir el ingreso de HLB es posible; demorarlo, imprescindible; Tucumán está libre todavía de la presencia del vector de la bacteria y es muy importante preservar esa situación", añadió.

El Programa que se inició tiene por objeto, en esta primera etapa, la capacitación de un contingente de 50 auxiliares de monitoreo, alumnos del último curso de escuelas secundarias de la provincia, vecinas en áreas citrícolas.

Consultado sobre la real utilidad de esta iniciativa, Gastaminza advirtió que la escuela media es, en primer lugar, una caja de resonancia socialmente muy potente. "La prevención del HLB implica que la sociedad tome especiales recaudos (como evitar el ingreso de brotes, yemas y frutos a través de la frontera, o la eliminación de la "Murraya Paniculata", la planta hospedera. La difusión responsable de consignas de campaña por parte de personas capacitadas para retransmitir y ayudar a entender la información técnicamente supervisada, es un valor agregado de mucha relevancia", remarcó.

"Respecto del monitoreo, los alumnos serán capacitados cinco meses en clases teóricas, experiencias de laboratorio y de monitoreo (en Tucumán y en Jujuy, donde el vector está presente); así contaremos, a inicios del verano, con un grupo de preuniversitarios sumado al esfuerzo de todos los actores de la cadena citrícola", afirmó.