La presidenta, Cristina Fernández de Kirchner, estuvo apenas unos seis minutos en el solar. Apenas llegó, se trasladó hacia el Salón de la Jura, donde dejó una ofrenda floral y, luego firmó el Libro de Visitas. Esas fueron las únicas dos acciones que desarrolló, con la previa entonación del Himno Nacional Argentino, interpretado por la Fanfarria Alto Perú.

El Gabinete nacional en pleno acompañó a la jefa de Estado, igual que el gobernador, José Alperovich, y su esposa, Beatriz Rojkés.

Antes de que Cristina llegase al solar donde se declaró la Independencia, algunos de sus ministros hablaron con la prensa y dirigieron palabras con un fuerte contenido político. "Tucumán es una muestra de cómo avanzó este país y por ello pensamos continuar con este proyecto", dijo el vicepresidente Amado Boudou. El ministro del Interior, Florencio Randazzo, también reivindicó el "proyecto nacional" e instó a continuar acompañando a la Presidenta. "Estamos comprometidos en continuar solucionando los problemas del país", dijo.

El gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey -también presente en el solar- aseveró que su provincia, al igual que Tucumán, están involucrados en el proyecto kirchnerista. "En las próximas elecciones trabajaremos a la par de este Gobierno nacional, del cual somos parte", ratificó.

En los alrededores de la Casa Histórica, unos cientos de militantes aguardaron la llegada y la partida de Fernández de Kirchner, a quien vivaron y aplaudieron en todo momento. La espera fue larga, pero la presencia de la Jefa de Estado en "la casita de Tucumán" fue breve.