CÓRDOBA.- El acuartelamiento de buena parte de la Policía cordobesa derivó ayer en que la capital de la provincia viviera una jornada dramática, signada por los robos y los saqueos.
Al cierre de esta edición, al menos 15 supermercados y locales comerciales de la capital cordobesa habían sufrido saqueos y robos durante la tarde y la noche, según consignaban la edición digital de La Voz del Interior y la agencia de noticias DyN. Durante la tarde, sólo dos locales habían sido reportados como víctimas del accionar de medio centenar de saqueadores en el barrio SEP, a metros del sitio donde se concentraron los policías que protestan por mejoras en los salarios y en las condiciones de trabajo.
Pero, con el correr de las horas y a medida que caia la noche, el descontrol se generalizó.
“Llegaron unas 20 personas, rompieron vidrios con piedras y palos, y se llevaron computadoras, cajas registradoras, bebidas y todo lo que encontraban. Aprovecharon la falta de policías para actuar”, aseguró el empresario Lucas Almada, responsable de uno de los supermercados.
Las imágenes de hombres y mujeres llevándose carritos con mercadería, con bebidas alcohólicas y hasta con televisores LCD y con termotanques fueron una constante.
Jorge Cuadrado, conductor de Telenoche Córdoba, informaba por medio del canal de Cable Todo Noticias la zozobra que se vivía en la ciudad mediterránea. Enumeró que, además de los supermercados, fueron saqueadas tiendas de ropas, casas de electrodomésticos, locales de venta de teléfonos celulares y hasta concesionarias de motos.
Los negocios ubicados en las avenidas de acceso a Córdoba fueron los más perjudicados. La televisión mostró escenas de vándalos llevándose, inclusive, coches para bebés. Los efectivos del grupo de élite ETER (Equipo Táctico Especial Recomendado) disuadieron a tiros a algunos saqueadores. También se habrían producido enfrentamientos entre delincuentes y vecinos, que resistieron intentos de robos de cocheras.
La Cámara de Supermercados indicó que hoy no abrirán las puertas de los locales si no es posible garantizar la seguridad. “Vamos a esperar que esto llegue a un acuerdo. Abrir sin Policía es muy difícil”, dijo el vicepresidente de la entidad, Benjamín Blanch. Las versiones periodísticas coincidían anoche en que tampoco iban a abrir los bancos. A la medianoche ya estaban suspendidos los servicios del transporte público de pasajeros: no había colectivos ni taxis.
Pasada la medianoche, el Poder Ejecutivo había resuelto otorgar asueto a la administración pública provincial.
Regreso apresurado
El gobernador, José Manuel de la Sota, había viajado ayer hacia Colombia, para participar de un encuentro de mandatarios, pero en la escala en Panamá fue informado de la huelga, por lo que emprendió el retorno y llegó en los primeros minutos de hoy.
Según informaron las agencias de noticias, sumaban unos 6.000 los agentes que se encontraban acuartelados en distintas dependencias policiales, acompañados por sus familiares y también por policías retirados.
Hasta anoche, las negociaciones con el Gobierno habían fracasado. El Estado había ofrecido en un primer momento un 52% de aumento en los adicionales que cobran aparte del sueldo.
Anoche, según señalaron voceros de los policías, otro ofrecimiento contemplaba un incremento de $ 1.000 en diciembre y de otros $ 1.000 para enero.
“Es difícil que podamos arreglar esta situación sin una propuesta que signifique un aumento al básico. El ofrecimiento está totalmente lejos de las pretensiones: $ 13.000. No se toca el básico”, dijo el abogado de los policías, Miguel Ortiz Pellegrini.
El jefe de Gabinete de Córdoba, Oscar González, reivindicó la oferta a las fuerzas, a la que denominó “muy importante”, y manifestó que las aspiraciones de los agentes son “irrazonables”.
“Hemos pedido la colaboración de Gendarmería, pero lamentablemente no hemos tenido eco de las autoridades nacionales”, manifestó el funcionario.