SAN PABLO, Brasil.- Millones de corazones argentinos se paralizaron cuando el volante suizo Blerim Džemaili se desmarcó en el área del arquero Sergio Romero y ganó de cabeza. La pelota pegó en el palo y, tras el rebote, golpeó en la pierna del jugador helvético y salió de la cancha.
Fueron segundo infartantes, sobre todo considerando que la jugada ocurrió luego de que Ángel Di María marcara el gol de la "albiceleste". Por fortuna, el palo impidió que el cabezazo de Džemaili se convirtiera en el empate de Suiza.