El Gobierno nacional evalúa subsidiar las tasas correspondiente a los aportes patronales y del empleado, con el fin de generar nuevos empleos formales en las empresas del NOA y el NEA.

Así lo adelantó ayer José Cano, responsable del Plan Belgrano, durante su presentación en la primera jornada de la Expo Apronor. El funcionario dijo que este proyecto fiscal fue presentado ante el presidente Mauricio Macri, entre otras medidas orientadas a impulsar al Norte Grande.

Según explicó el funcionario nacional, la iniciativa contempla que el Estado se haga cargo de los aportes que el empleador está obligado a cumplir por conformar un plantel. Esa proporción será de un 28%. La subvención también incluye el descuento que se le aplica al trabajador en concepto de beneficios sociales, de un 20%, según indicó.

“Es una propuesta que se le está presentando al presidente de la Nación para el NOA y el NEA. Al empleador se le subsidiará ese 48% el primer año, luego se reducirá esa proporción en base a una escala establecida hasta el tercer año. Eso permitirá que la empresa pueda registrar y tomar la mayor cantidad posible de empleados”, contó Cano a LA GACETA tras su presentación en la muestra agropecuaria, que se extenderá hasta mañana en la Ramada de Abajo, en la ruta 317, altura kilómetro 9,5.

“La idea es que haya tasas distintas para el NOA y el NEA respecto del resto del país”, añadió el titular del Plan Belgrano.

Los aportes patronales se efectúan por mes, generalmente, a través del sueldo. Son obligatorias para el empleador e indispensables para el trabajador debido a que esa contribución se destina al sistema previsional, entre otros beneficios.

Recuperar el plan social
Cano adelantó otra medida de impacto en el Norte Grande. La Nación impulsaría un programa que permita la restitución al beneficiario del plan social, en caso de pérdida de un puesto de trabajo.

“Si una persona llegara a perder su puesto laboral durante los primeros 18 meses, podrá volver a su situación original, es decir, podrá recuperar el beneficio el programa social”, comentó el titular del Plan Belgrano.

“Esto apunta a desterrar el miedo que genera la pérdida del plan social al momento de ingresar al régimen formal laboral”, enfatizó el radical tucumano, quien expresó que esta última medida será anunciada por el Ministerio de Trabajo nacional y se realizará en el marco del programa de infraestructura destinado al norte argentino.

El Gobierno nacional también impulsará una modificación del régimen de pasantía, que permitirá la capacitación del personal durante 18 meses. Esa iniciativa no representará algún costo para el sector privado, según indicó Cano.

El NOA es la región que registra el mayor índice de informalidad laboral en el país, con un 42% de la población, según datos de diciembre pasado del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).

En el NEA, en cambio, esa variable se mantuvo casi en línea con otras regiones, con un 33,4%.

Hasta ahora, las medidas oficiales no han resultado efectivas para reducir el trabajo “en negro” en esta parte del país. Al tercer trimestre de 2015, en Tucumán se observó el porcentaje más alto del país: un 47,6% de los asalariados que residen en el Gran San Miguel no fue registrado por sus empleadores. Eso significó que de un total de 269.600 asalariados, casi 130.000 se ubicaban en la franja de la informalidad. Hace cuatro años, la tasa en la provincia había sido de un 38,4%. “Cada una de las propuestas es una política diferenciada para el Norte Grande”, concluyó Cano.