El presidente Mauricio Macri, líder de Cambiemos, expresó el dato ante las cámaras de televisión el viernes a la noche, y desató revuelo en la escena política local.

“Tenemos que terminar con los ñoquis y con los beneficios personales en el Estado. No puede ser que en Tucumán haya 80 empleados por legislador”, señaló el jefe del Estado nacional, en una entrevista que transmitió América TV.

Sin embargo, al ser consultado por LA GACETA, el vicegobernador Osvaldo Jaldo descartó esas cifras. “Ningún legislador, ni oficialista ni opositor, tiene 80 empleados en la Legislatura de Tucumán”, sostuvo el peronista, máxima autoridad del cuerpo legislativo.

Luego, Jaldo consideró que la cantidad de trabajadores en relación de dependencia de ese poder debe ser puesta en contexto. “No se puede imputar a la actual gestión, que lleva dos años, la planta de personal permanente y transitorio del Poder Legislativo. No hay que olvidar que antes tenía un sistema bicameral, de Diputados y Senadores (provinciales)”, argumentó el vicegobernador.

El cambio al régimen unicameral se concretó tras la reforma constitucional de los 90, cuando se pasó a un cuerpo legislativo de 40 miembros. Luego de una nueva revisión a la Carta Magna, en 2006 (y bajo la presidencia del actual gobernador Juan Manzur), los convencionales constituyentes elevaron la cifra de escaños a 49.

Fuentes del Poder Legislativo indicaron a este diario que una cifra estimada del personal de planta y transitorio dependiente de ese órgano ronda los 1.500 cargos. Sin embargo, no hay ningún instrumento oficial -presupuestos, revisiones de cuentas de inversión y otros documentos públicos- en los que consten estos detalles.

El régimen de trabajo en la sede de Muñecas al 900 contempla diversas variantes. Los de mayor estabilidad son los de planta permanente y los transitorios. Estos deben registrar su entrada y salida al lugar de trabajo colocando la huella digital en alguno de los sensores instalados en el edificio legislativo. Además, están los cargos “políticos”, conocidos como “empleados de bloque”, que suelen ser dados de baja al finalizar la gestión de una conformación parlamentaria.

Un antecedente

El Presidente se refirió de modo crítico a la planta legislativa al sostener su explicación sobre el déficit en las arcas estatales. En ese sentido, también mencionó la gestión de la ex procuradora general de la Nación, Alejandra Gils Carbó, quien -según Macri- nombró “a 1.100 personas, una locura”.

Pero no es la primera vez que se genera polémica respecto de la cantidad de empleados en el Poder Legislativo de Tucumán. El antecedente inmediato se registra cuando el actual senador José Alperovich era gobernador, y el hoy presidente subrogante de la Cámara, Fernando Arturo Juri, era vicegobernador. En esos momentos -entre 2006 y 2007-, la relación entre los peronistas era por demás tensa. Tras el reclamo de Alperovich, Juri les dio de baja a unos 5.000 empleados legislativos.