La encuesta realizada por la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres les permitió a los técnicos obtener datos sobre cuáles son las condiciones de los cañaverales renovados, como así también de las plantaciones de socas.

Considerando las condiciones en que se encuentran actualmente las cañas plantadas, la información señala que el 46% y el 12% de los nuevos cañaverales se encuentran en “un buen o muy buen estado”, respectivamente. Asimismo, señalan que el 37% de estos lotes muestran un desarrollo regular y el 5% restante se encuentra en malas condiciones.

En cuanto a las cañas socas, los resultados revelaron que el 71% de estos cañaverales estarían en buenas condiciones y un 9% en condiciones muy buenas, mientras que el 20% restante de estos lotes muestran un estado regular.

Al consultar sobre los daños provocados por las quemas acontecidas durante la zafra 2020, el 63,6% de los encuestados informó que sus cañaverales, en distinta magnitud, fueron afectados por el fuego.

Asimismo, el 72,3% de los encuestados reconoció que los lotes quemados se encuentran actualmente en peores condiciones generales que aquellos cañaverales que mantuvieron o incorporaron el RAC.

En este sentido, se destaca que el 89% de los lotes de soca quemados, fueron afectados por la sequía y atacados severamente por Elasmopalpus, situación que provocó que un 4,6% de la superficie quemada tuviera que ser descepada de forma anticipada a causa de las malas condiciones que presentaban.

Además, los productores/empresas consultados manifestaron que muchos de los lotes quemados que no se desceparon en ese momento, actualmente se encuentran en malas o regulares condiciones y se esperan bajos rendimientos culturales.

En las cañas socas descepadas predominan lotes de TUC 77-42 y LCP 85-384 de edades iguales y mayores a cinco cortes (soca 4 y más viejas).