El lunes será un día clave en la investigación de la denuncia por presunto abuso de un niño en el colegio Tulio García Fernández. Para esa jornada está previsto que se desarrolle la cámara Gesell, es decir, la medida en la que, a través de juegos, se le toma declaración a la víctima para que cuente cómo se produjo el hecho. Se supone que de ese paso procesal se podría definir la situación de una persona que trabajaba en el establecimiento.
Hace poco más de dos semanas, el pequeño fue atacado en circunstancias que todavía no están claras en algún lugar del colegio, ubicado en avenida Mitre al 300. Los padres realizaron la denuncia y después comunicaron a las autoridades del establecimiento lo que había ocurrido. La fiscala María del Carmen Reuter quedó al frente de la investigación.
La investigadora, dándoles plazos, exigió a las autoridades del colegio que, entre otros datos, entregaran el listado del personal docente y no docente e información sobre el movimiento del establecimiento, y que aportaran las imágenes que podrían haber tomado las cámaras de seguridad instaladas en el colegio.
Fuentes judiciales confirmaron que en un principio, el apoderado legal del Tulio había anunciado que solicitarían asumir el rol de querellante en la causa para colaborar con la investigación, pero hasta el cierre de esta edición no habían cumplido con ese paso. Los progenitores del niño sí, lo hicieron desde un primer momento.
Un “hombre malo”
En lo que se refiere a testimonios, se presentaron los padres de la víctima a contar todo lo que había sucedido. En ese acto procesal, el padre contó que el pequeño había señalado a una persona como el “hombre malo”. Como estaba en condiciones, brindó los datos para que se hiciera un retrato hablado. En otras palabras, los investigadores ya contarían con el rostro del posible atacante.
También se presentó en Tribunales la maestra del pequeño. Habría señalado, según confiaron fuentes cercanas a la investigación, que el día en el que se produjo el ataque en el aula no hubo ningún hecho fuera de lo normal y que salieron al exterior en una sola oportunidad, pero aclaró que fueron y regresaron todos juntos. La directora también aportó esa versión, que era la que la docente le había dicho a ella. La representante del Ministerio Público Fiscal ordenó que se analizaran las imágenes que tomaron las cámaras de seguridad para tratar de encontrar algún tipo de indicio.
Pericias clave
Paulatinamente la fiscala va recibiendo los resultados de algunas pericias que ordenó realizar cuando la causa llegó a sus manos. Por ejemplo, ya cuenta con todo el relevamiento fotográfico que se hizo en el establecimiento. También recibió los estudios de los médicos forenses que habrían confirmado que el menor no tendría lesiones en sus partes íntimas, por lo que no se trataría de un caso de abuso con acceso carnal. Pero sí hubo un ataque, ya que los peritos lograron encontrar un pelo de otra persona que ya fue reservado para una futura e inminente prueba genética.
Hasta el momento, no hay ninguna persona acusada por el hecho. Sí hay un sospechoso que no sería docente en el establecimiento. La situación procesal del señalado podría definirse el mismo lunes.
“Desde el primer momento estuvimos a disposición de la familia y de la Justicia. El colegio respondió inmediatamente al requerimiento fiscal”, explicó la mediadora del colegio, Dolores Suárez. “Nosotros escuchamos a la familia pero la Justicia podrá escuchar al niño en la cámara Gesell”, agregó.
“Quiera Dios que esto sea sólo un hecho aislado. Esto nunca había pasado en la institución”, concluyó.
Prudencia en las redes sociales
- Sea prudente a la hora de opinar en sus redes sociales
- Nunca informe datos o detalles que impliquen a un menor (nombre, edad, foto, a que curso va, etcétera)
- Sea responsable a la hora de informar sobre un caso que está en etapa de investigación. No caiga en prejuicios
- Tenga en cuenta el concepto de “ciudadano digital”: somos responsables y críticos sobre lo que leemos y escribimos en las redes sociales
- Recuerde que el mundo digital nos alberga a todos, incluso a los niños más pequeños, a quienes se debe proteger de malas informaciones o de contenido que los exponga
¿Qué es una cámara Gesell?
La cámara Gesell es una herramienta con la que cuenta la Justicia para evitar que se revictimice a una persona a la hora de declarar
Se utiliza principalmente en los casos de abusos sexuales; también en causas en las que se necesita incorporar el testimonio de un menor de edad
La víctima, en este caso (podría aplicarse también a un testigo), ingresa a una sala en la que un psicólogo lo interroga sobre el hecho en cuestión.
El equipo de profesionales utiliza juegos, tareas lúdicas y otros recursos para que el interrogatorio sea lo menos traumático posible para el menor
El testimonio del declarante queda grabado y de esa manera se evita revictimizarlo, dado que no debe presentarse de nuevo para contar su historia