Un grupo de periodistas que está en Ucrania cubriendo la guerra vivió un momento de tensión y miedo cuando fueron requisados en un control policial y trasladados a una comisaría. El tatuaje de Maradona que uno de ellos tiene en la pantorrilla los salvó de ser deportados.
La historia fue contada en Instagram por el periodista chileno, Daniel Matamala, enviado especial de Chilevisión para cubrir el conflicto armado. Viajó junto al equipo de Telefé, también integrado por el camarógrafo Juan Zamudio. Ambos fueron interceptados por oficiales ucranianos en plena ruta.
Una estremecedora imagen revela el ataque a civiles en Ucrania"Hoy, en uno de los controles de la ruta, la policía nos requisó documentos, cámaras, teléfonos, y nos escoltaron a la comisaría. Los primeros interrogatorios fueron tensos: es un país en guerra y se sospecha de espías o saboteadores", contó el corresponsal de Chilevisión a través de historias de Instagram.
En la comisaría les pidieron los papeles, entre ellos el pasaporte. Cuando los policías vieron que uno de ellos era argentino, lanzó el clásico "Messi, Maradona". Un lenguaje universal en cualquier país. En ese momento, según cuenta Matamala, su colega Zamudio mostró el tatuaje del Diez que tiene en su pantorrilla. "Así que nos dejaron libres y nos devolvieron los equipos. Nos rescató la mano de D1OS", destacó.
Si Ucrania cumple condiciones, desde el Kremlin pararán los ataques en "cualquier momento"Son muchas las historias de periodistas argentinos que vivieron situaciones extremas alrededor del mundo, y que cuentan que el mundialmente famoso Maradona les salvó la vida. Diego Korol fue uno de ellos. El conductor de "Peligro sin codificar" contó que había viajado a Nigeria a cubrir el Mundial Sub 20. Junto a su equipo de trabajo viajaban de noche cuando el plena ruta fueron abordados por unos hombres armados.
"Miren que mi nombre es Diego Armando", dijo el conductor argentino en el momento en que los que sostenían las armas vieron su credencial de periodista. Uno de ellos comenzó a exclamar el nombre de Korol, que por casulidad se llama igual que el "Diez". "Habrán pensado que yo era Maradona, no entendíamos nada", aseguró. Finalmente, quienes los apuntaban comenzaron a extraer nafta de otros autos para cargar el vehículo y así pudieron continuar con su viaje.