Para implementar la resolución conjunta 4/2021, la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, al Ministerio de Desarrollo Productivo de la Nación, a la Secretaría de la Pequeña y Mediana Empresa, al Ministerio de Trabajo de la Nación y a la Superintendencia de Riesgos del Trabajo tomaron diferentes parámetros.
Entre ellos se destaca el reglamentar en todo el territorio del país el régimen de habilitación y de funcionamiento de los establecimientos donde se faenan animales y se elaboren o depositen productos de origen animal, estableciendo que dicho régimen comprenderá los requisitos de construcción y de ingeniería sanitaria, los aspectos higiénico-sanitarios, la elaboración, la industrialización y el transporte de las carnes, de productos, de subproductos y de derivados de origen animal destinados al consumo local.
Además, lograr un plan integral para mejorar la productividad ganadera, diversificar la producción y modernizar los sistemas de comercialización de ganado y carnes.
Resulta imprescindible cuidar del bienestar físico de los trabajadores del sector cárnico, evitando que transporten con su cuerpo medias reses de pesos muy superiores a lo que dicen las reglamentaciones.
A raíz de ello se estableció que toda manipulación, transporte, distribución, carga y/o descarga de productos cárnicos, cuyo peso sea superior a los 25 kg, que realicen trabajadores y se lleven a cabo en empresas y/o establecimientos dedicados a la faena de ganado bovino, ovino, porcino, equino, caprino, animales de caza mayor y/o menor o industrialización de los mismos, o en su cadena de transporte y distribución mayorista o minorista, se deberá realizar con la asistencia de medios mecánicos adecuados.
Que a efectos de proteger la salud del trabajador y facilitar la comercialización de los productos resultantes de carne con hueso la forma de fraccionar las medias reses debe contemplar los cortes tradicionales, respetando la integridad anatómica de las piezas cárnicas, con la finalidad de mantener su valor monetario al momento de su comercialización en la carnicería, evitando afectar zonas donde se encuentran cortes apreciados por los consumidores.
Debido a ello resulta necesario modernizar la cadena de distribución de carnes en medias reses para pasar a una distribución por trozos anatómicos de menor peso que le permita a los abastecedores realizar una mejor asignación de los trozos de acuerdo a las necesidades de cada mercado minorista.
La implementación del nuevo sistema de comercialización requiere, entre otras transformaciones, adecuar la infraestructura de varios de los frigoríficos existentes en todo el territorio nacional, agregar espacios de oreo, aumentar las instalaciones, incorporar algunas maquinarias y equipamientos de frío.
A raíz de esto la resolución 4/2021 propone implementar programas de asistencia financiera para frigoríficos y faenadores.