Vecinos de La Madrid irán a la Justicia si no les dan una solución ante las crecientes

Los vecinos de La Madrid estudian la posibilidad de recurrir ante la justicia con el afán de lograr, por esta vía, que se exija a la Provincia solución a las causas que provocan las inundaciones en el pueblo. El principal problema es la periódica salida de cauce del río Marapa. Así, a medida que se acerca el período estival, en la comunidad crece el miedo a que se produzca otro desmadre del lecho, como el último ocurrido en el 2017 y que tapó a casi todo el pueblo. “Cómo no vamos a estar con temor si los pronósticos anticipan un verano lluvioso y en el río no se hizo casi nada”, dijo Norma Guzmán. La mujer es una de las referentes de la comisión de vecinos autoconvocados que están movilizados en procura de lograr respuestas a la urgencia de ejecución de obras hídricas que contengan al Marapa. “Estamos sufriendo la situación de inercia del Gobierno que no hace nada. Los trabajos en el Prelluvia fueron insignificantes. Todos sabemos que se tiene que ejecutar la defensa o escudo que va a proteger a la comunidad y, además, reencauzar el río San Francisco que ahora avanza por el canal de la finca del diputado nacional Roberto Sánchez y desemboca en el Marapa”, apuntó la dirigente. “Se tiene que trabajar en la protección del pueblo. Estamos angustiados porque no sé si podremos volver a tolerar otra inundación. Siempre perdemos todo y hay que comenzar de nuevo. Aunque el comisionado comunal nos escucha y gestiona algunas obras, no tiene respuestas adecuadas de la Provincia”, apuntó. En los próximos días los vecinos serán recibidos por el ministro del Interior y electo vicegobernador Miguel Acevedo. Ahí le plantearán la preocupación de toda la gente de La Madrid. “Esperamos tener soluciones definitivas porque, de lo contrario, y como último recurso, vamos a tener que apelar a la Justicia a través quizás de un amparo. Puede ser que mediante una decisión judicial se exija a la Provincia que se hagan las obras necesarias para evitar otra inundación”, advirtió Guzmán.

Trabajos importantes

Según el comisionado comunal Héctor Soria, si bien en la cuenca del Marapa no se ejecutaron aún los trabajos millonarios previstos, como el “escudo de defensa”, con el programa Prelluvia del Ministerio del Interior la comuna ejecutó dos canalizaciones importantes. “Río arriba hemos cortado una curva pronunciada que hacía que el agua, cuando llegaba de golpe, se desborde ahí y avance hacia el pueblo. Otra había aguas abajo e hicimos lo mismo para reducir los riesgos de desbordes”, explicó. “Esto hacemos mientras esperamos la adjudicación del escudo. Pero, como se sabe, este trabajo ya va a quedar para el año. Los vecinos están preocupados por los pronósticos de lluvia y es comprensible. Pero estamos trabajando para que no pase nada”, remarcó Soria. “En estos días recibo una retroexcavadora para trabajar en el dragado del cauce y darle mayor profundidad”, añadió. Soria dijo que hay esperanzas de que el BID financie los trabajos de reencauce del San Francisco, que ahora desemboca en el Marapa luego de tomar por la finca Sánchez. “Este cauce antes era un arroyo que giraba hacia Taco Ralo. Ahora se transformó en un río que en el verano trae una impresionante cantidad de agua desde Catamarca”, añadió el funcionario.

“No es responsable”

La responsabilidad que tendría el canal Sánchez en el desvío del río San Francisco hacia el Marapa fue negada por el diputado nacional y propietario del inmueble por donde corre el conducto. “Lo que pasó con el San Francisco es producto de los desmontes. En el 2017 se llevó puesto al puente de la ruta 334, que era un paso de siete metros de ancho y que se hizo de 200 metros. Semejante caudal se nutrió de ríos y arroyos que hace 50 años eran endorreicos (no tenían final) y que nacían en el piedemonte”, explicó. “Esos cauces que bajaban desde Catamarca, entre ellos La Posta, Huacra y El Sueño, se perdían en el monte de la llanura. Se fue desmontando y entonces el agua de lluvia que antes caía en los árboles y la contenía, ahora se abre camino entre los cultivos porque la infiltración es menor. De ahí que cada agricultor fue derivando el agua hacia otras fincas vecinas”, añadió el parlamentario. Según Sánchez, a raíz de esas desviaciones, el río San Francisco un día se nutrió de toda el agua de las fincas de más al sur. “Fue entonces –dijo- que no solo se llevó puesto al puente de la 334, sino que también entró a nuestra propiedad, que se encuentra antes de llegar al Marapa, arrasó con una casa y un galpón”, contó. Sánchez insistió en que “no es del canal Sánchez la culpa del desvío del San Francisco”. “El volumen arrasador de agua viene de 40 o 50 propiedades de más al sur y se va por la orilla de nuestra propiedad para salir en el Marapa” remató.

“Es el dique Escaba”

El ingeniero agrónomo Juan Eduardo Taboada fue director de Irrigación de la Provincia entre los años 1980 y 1998. Fue el que diseñó años atrás el canal que pasa por la finca del parlamentario. “El conducto que le hice era reducido y volcaba el agua hacia el Marapa. Pero con el tiempo las correntadas lo fueron agrandando. Los cauces endorreicos ganaron las fincas desmontadas y de ahí fueron siendo derivados hasta llegar a caer en el Marapa. El canal Sánchez no tiene responsabilidad con lo ocurrido en el 2017”, insistió. “Con los años de experiencia que tengo considero que uno de los factores principales que llevan a inundarse La Madrid es el dique Escaba. El pueblo se llena de agua cada vez que levantan las compuertas. Esto viene sucediendo desde hace 50 años. Es decir que es un tema de vieja data”, remarcó.

Claves de la creciente de 2017

1). El río San Francisco, que antes era un cauce manso, se volvió caudaloso por los desmontes y destrozó el área de la ruta 334.

2). El río Marapa, a unos 11 km al norte del San Francisco, lleva aguas desde el dique Escaba, al Oeste, hacia el dique Frontal, al Este.

3). Para evitar desbordes del San Francisco, los productores hicieron canales -en especial el “Sánchez” para llevar el agua hacia el Marapa.

4). La Madrid recibió el embate de las aguas del Marapa, desbordado por los sedimentos acumulados en el “canal Sánchez”.