Astronomía, arqueoastronomia, astronomía cultural y algo más

Cuando se habla del trabajo de un astrónomo se piensa en una persona que pasa muchas horas mirando el cielo con un telescopio para descubrir algo. La investigación astronómica moderna es muy diferente. El astrónomo no mira el cielo con sus ojos, sino con cámaras digitales que están instaladas en telescopio en Tierra o en el espacio. Las imágenes obtenidas deben ser procesadas para poder analizar lo que ocurre en los objetos del cielo. Pasan más horas frente a una computadora que trabajando con un telescopio. No todos los astrónomos realizan sus observaciones, algunos usan bases de datos, que en astronomía son muchas. Otros hacen trabajos teóricos, fundamentalmente desarrollando modelos.

Hay otros trabajos que hacen los astrónomos y que no son tan conocidos como es el estudio del movimiento de satélites, análisis de imágenes satelitales, astronomía de la cultura y arqueastronomía. La arqueoastronomía estudia las creencias y conocimientos que tenían los pueblos antiguos sobre el cielo y que quedaron plasmados en objetos arqueológicos como pueden ser construcciones o elementos de medición. La observación del cielo ha sido una actividad de todas las civilizaciones desde la antigüedad, de hecho se considera que la astronomía es la ciencia más antigua. La observación del cielo se hacía por razones prácticas, como saber en qué época había que plantar cada cosas o cuándo había que trasladar el ganado para el pastoreo. Recordemos que los calendarios y la definición del tiempo son relativamente modernos, por eso la necesidad de observar del cielo para fijar fechas y horas. En todo el mundo hay lugares de interés arqueoastronómico, algunos conocidos y otros no. Los lugares de Europa, como Stonehenge en Inglaterra y algunos lugares en Asia fueron muy estudiados. En América también hay lugares muy estudiados como las ruina de Teotihuacán y Chichen Itzá en México, Machu Pichu en Perú y Los Moáis en Chile, pero hay muchos más. En Argentina también los hay, quizás el más conocido es la Cueva de las Manos en Santa Cruz. Los pueblos originarios dejaron sus huellas, pero no han sido muy estudiadas aun. En el norte argentino hay muchos lugares de valor arqueoastronómico, entre ellos la Ciudacita en los Nevados del Aconquija, que fue estudiado por los Dres. Orlando Bravo y Enrique Würschmidt. Esto lugares, muchas veces, son difíciles de acceder, lo que complica la realización de los trabajos.

La astronomía cultural o astronomía de la cultura estudia la relación del hombre con el cielo, en el contexto cultural en el que estaban inmersos, en el pasado y en el presente. Tiene algunos puntos de contacto con la arqueoastronomía, aunque no es lo mismo. En algunos lugares hay muchos estudios sobre este tema. En nuestro país hay algunos grupos que estudian la astronomía en la cultura, aunque no se han abordado todos los temas. Por ejemplo la astronomía en los Pueblos Originarios ha sido poco estudiada. La astronomía cultural en el presente es poco conocida. Mucha gente, todavía, usa los fenómenos astronómicos en la vida cotidiana, a veces, sin saberlo.. Quizás lo más usado es el movimiento del Sol para aprovechar su luz y su calor de la manera más eficiente. En muchas escrituras religiosas, como la Biblia, hay referencia a eventos astronómicos. Hay celebraciones que tienen que ver con la posición de objetos celeste, como la fecha de la Semana Santa para los católicos, la Pascua Judia y el Ramadan que están relacionados con el equinoccio de otoño en el hemisferio sur y el Sabbat para los Judios que se establece con el anochecer del viernes y el sábado.

La Astronomía es una ciencia interdisciplinaria, en la que participan astrónomos, físicos, químicos y matemáticos en lo que hace a la investigación astrofísica. Pero también participan ingenieros y técnicos en el desarrollo y mantenimiento del instrumental. En el caso de la arqueoastronomía y la astronomía cultural las áreas que colaboran son más amplias, ya que participan además arqueólogos, antropólogos, geógrafos, historiadores, etc.

La Unión Astronómica Internacional tiene una División (Division C: Education, outreach and Heritage) que trata estos temas. Dentro de esa División hay Comisiones que entienden sobre Astronomía Cultural y Arqueoastronomía, lo que pone en evidencia la importancia que tienen estos temas para la comunidad astronómica en todo el mundo.

En Argentina hay mucho por hacer. Sería bueno que se puedan desarrollar más estos temas y que tengan el apoyo que se necesita, tanto académico como económico.