Seguirá detenido el acusado del crimen de El Manantial

La defensa de Santiago “Chueco” Acosta, el único imputado por el crimen de Víctor Manuel Alejandro Barrionuevo (24 años), asesinado de un disparo el pasado 11 de agosto en el barrio 143 Viviendas, solicitó la revocación de su detención, otorgada el pasado 24 de agosto, por considerar que las evidencias del MPF y las producidas por la defensoría no ubican al acusado como partícipe. No obstante, tras una extensa exposición, la jueza dispuso que Acosta continúe cumpliendo la medida de prisión preventiva.

La madrugada del 11 de agosto, Barrionuevo estaba en el velorio de un conocido. Les dijo a sus parientes que saldría a comprar algo, pero nunca regresó. Minutos después de su salida su madre y otros allegados se enteraron de que el joven había recibido un disparo en la cabeza. Rápidamente lo trasladaron hacia el hospital Padilla, lugar donde perdió la vida.

Para la Fiscalía de Homicidios I, a cargo de Ignacio López Bustos, hubo tres personas involucradas en el delito: Santiago “Chueco” Acosta, “Colo” y “Chupa”. Según su teoría, esa madrugada, Barrionuevo comenzó a discutir con los tres sospechosos, con quienes ya habría tenido una enemistad. En ese momento “Chupa” y Acosta habrían rodeado a Barrionuevo y “Colo” le habría disparado en la cabeza. Luego del hecho los tres huyeron. Una semana después Acosta se puso a disposición de la Justicia mientras que los otros dos sospechosos continúan prófugos.

La defensora de Acosta, María José Ahumada, mediante una audiencia realizada ayer, solicitó el cese de la prisión preventiva para su representado y en cambio pidió que sea sometido al proceso con medidas de menor intensidad por considerar que surgieron nuevas evidencias en la investigación que sugieren que Acosta no fue partícipe sino un testigo del hecho. “La verosimilitud del hecho sostenida por la evidencia que tenía el MPF ya no permite sostener la teoría del caso. Esta defensa aportó suficientes evidencias testimoniales e informes periciales para poder probar que el grado de verosimilitud de participación de Santiago Acosta está gravemente reducido”, manifestó.

Para argumentar su pedido, Ahumada dijo que en la audiencia de formalización de cargos, donde se imputó a Acosta ser coautor del delito de homicidio agravado por el uso de arma de fuego, el MPF basó su acusación en dos testigos de identidad reservada que manifestaron haber presenciado el hecho e identificaron a Acosta, “Colo” y “Chupa” como los autores del crimen. “El juez (Sebastián) Norniella Parache señaló que podían advertirse algunas contradicciones y le dijo al MPF que debía ahondar en estas cuestiones. Ya transcurrieron más de tres meses y todavía no incorporaron ninguna declaración nueva que tenga peso para sostener la participación de Santiago”.

Además, citó las nuevas evidencias aportadas por la defensa, en la que incluía tres testimonios de personas que estuvieron con Santiago minutos antes y después del ataque. “La declaración abona la teoría de que Santiago esa noche, como todas las noches, estaba en el quiosco de uno de los testigos, ubicado a una cuadra del lugar del hecho, ayudando al dueño y a su esposa a ordenar la mercadería. Los testigos manifiestan que Santiago a la 1 de la madrugada se ausentó no más de cinco minutos y que cuando volvió al quiosco regresó pálido, en estado de shock y les contó que había visto que a la vuelta mataron a una persona”, expuso Ahumada.

Luego de presentar las nuevas evidencias, la defensora solicitó que Acosta quedase en libertad cumpliendo medidas de menor intensidad, o que en su defecto fuese sometido a arresto domiciliario.

Tanto el auxiliar fiscal Ricardo Ybañez, como la querella, a cargo de Agustín Domínguez, se opusieron al pedido del cese de detenci

ión y requirieron que Acosta continúe privado de su libertad. Finalmente, la jueza Carmen Rosa López resolvió no hacer lugar al pedido de revocación porque consideró que los nuevos testimonios presentados por la defensa no fueron testigos presenciales del hecho, sino que permitieron ubicar en el tiempo y en el lugar a Acosta en la escena del crimen.