Accidentes por animales sueltos en la 307

El pasado sábado 2 de diciembre, pasadas las 20, dos autos chocaron de frente mientras circulaban por la ruta 307 en Tafí del Valle, cerca del barrio Las Nubes. A causa del choque, cinco personas resultaron heridas y los dos vehículos, destruidos completamente. Si bien la causa del siniestro no está confirmada, los investigadores no descartan la posibilidad de que un animal se haya cruzado en el camino, tal como dieron a conocer, informalmente, allegados a las víctimas. El jefe de la comisaría de El Mollar reconoció que “es una ruta donde hay muchos animales sueltos, por eso hay carteles que señalizan esto” y que  “hay que trabajar para concientizar a sus dueños de los riesgos que conlleva dejarlos sueltos”.

Se trata de un problema añejo, que se reactiva cada vez que se acerca la temporada de vacaciones o cuando esta ya se encuentra en auge, puesto que se generan inconvenientes constantes. En el caso que nos ocupa, se trata de un choque frontal ocurrido en medio de la niebla en un sector recto y la causa sería el cruce inesperado de un caballo, que obligó a una maniobra sorpresiva de una de las personas que conducían. Tras el choque, resultaron heridos un conductor (golpes leves) un niño que perdió el conocimiento, su madre, con fractura de cadera. Los tres son de la zona de Tafí del Valle. En el otro vehículo circulaban dos mujeres del Gran Tucumán, las cuales se encuentran internadas desde entonces en el Hospital Padilla, ambas con fracturas y una de ellas en la unidad de terapia intensiva.

No se ha sabido más del accidente. El jefe de la comisaría de El Mollar dijo a LA GACETA que aún no se ha podido tomar declaración a las víctimas. Cabe recordar que hace dos meses en la misma zona hubo un accidente de un motociclista de Tafí Viejo que chocó contra una vaca. Según la escueta información publicada en ese momento, el hombre falleció y se desconocen las circunstancias del percance, pero la repetición de estas emergencias y de los riesgos debería mover a la reflexión. El oficial de El Mollar dijo que se presentó una nota solicitando que Caballería se encargue de recorrer los caminos y secuestrar los animales que están sueltos y llevarlos hacia la Capital de la provincia. “Ellos cuentan con móviles en donde pueden guardar y trasladar a los animales, nosotros no. Aparte no contamos con el espacio físico para tenerlos acá”, explicó.

Con frecuencia se destaca que la 307 es una carretera saturada de animales sueltos. Se los ve a diario en diferentes partes del camino y la Policía, pese a que la Ley 3.487 la obliga a ocuparse del problema -tiene, además de Caballería, una División de Delitos Ambientales y Rurales que de vez en cuando da cuenta de operativos de secuestro de animales- suele no hacer más que acciones esporádicas de control. Al respecto, hace tiempo una rápida comparación con otras provincias del NOA realizada por consulta periodística de LA GACETA reveló que Santiago del Estero, Salta y Catamarca llevaban a cabo muchos más secuestros de animales sueltos en los caminos que nuestra provincia. Salta había instalado un sistema de postes de emergencia para que los conductores denuncien la presencia de peligros en las rutas, y Catamarca disponía en 2019 de dos camiones, una camioneta y 25 policías para hacer operativos de control. En esa provincia, por cierto, se espera que se realice juicio penal contra el propietario de una vaca por la tragedia de 2019 del motociclista Fermín Brizuela de Aguilares en la ruta 38, en la zona de Paclín.

Ciertamente, el problema excede la tarea policial y es más bien multidisciplinario, puesto que se origina en hábitos arraigados de los lugareños de dejar los animales para que pasten o se muevan cerca de las banquinas. Eso debería motivar la búsqueda de estrategias de municipalidades, comunas, Vialidad y otras reparticiones. Además de que genera costos para la sociedad entera, no sólo en daños que se terminan pagando posteriormente en juicios, sino en los gastos hospitalarios. El Hospital Padilla dio a conocer hace tres años las millonarias cifras que le cuesta a la comunidad la atención y el mantenimiento de las víctimas de accidentes en el nosocomio. Convendría tener en cuenta todo esto y actuar en consecuencia y no esperar solamente esos esporádicos operativos policiales, que no enfocan las causas de esta emergencia.

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