25 Diciembre 2023
En distintas oportunidades me dirigí por esta prestigiosa columna ante las autoridades del gobierno y organizamos educativos solicitando la reactivación de los programas EMER y EMETA que estaban vinculados con la enseñanza de huertas, cunicultura, avicultura, apicultura, porcinotecnia, tambera, piscicultura, herboristería, forestación y carpintería. El petitorio reiterativo fue debido a la decadencia visible de la política socioeconómico, cultural y educativo que venía padeciendo las familias de escasos recursos los niños con situaciones de vulnerabilidad social quedando hoy afectada hasta gran parte de la clase media. En este país rico de la naturaleza rebosante de intelecto ha quedado con más del 50% de la población muy pobre con muchos indigentes y los que fueron nos llaman miserables por esa casta que aún no aprendieron a conjugar al verbo dar en tiempo presentes. La situación es caótica, la tecnología y la ciencia artificial no van a callar al hambre como la semilla que germina sobre la tierra junto a la luz del sol; la espera se agota y la esperanza sueña aún con la ilusión de ver en el próximo ciclo lectivo 2024 a las autoridades educativas reactivar en los colegios la cultura educativa de los ítems mencionados para volver a ser los granjeros del mundo. ¡Feliz Navidad!
Pedro Pablo Castaño
pedrin_ppc_concep@hotmail.com
Lo más popular
