Atlético Tucumán: del -casi- triunfo al lamento por no liquidar el partido

El "decano" estuvo arriba en el marcador durante gran parte del partido, pero un descuido a los 88' terminó en gol y la historia terminó 1-1 en Avellaneda.

Fotos Matías Nápoli Escalero (especial para La Gaceta) Fotos Matías Nápoli Escalero (especial para La Gaceta)

La escena fue insólita: un periodista preguntó a Facundo Sava sobre sus impresiones acerca de la primera victoria en Copa de la Liga que acababa de obtener Atlético Tucumán ante Independiente en Avellaneda. Claro, el partido terminó en empate. Eso fue lo que le dijo amablemente el entrenador al periodista, apenas pudo salir de su asombro por el equívoco en la pregunta, que dejó atónitos y provocó sonrisas en el resto de los presentes en la conferencia de prensa.

Más allá de lo risueño de la anécdota es cierto que el “decano” tenía tan controlado el partido que era difícil imaginar que se le escaparan los tres puntos. De allí que seguramente el periodista cometió el error “fatal” de desentenderse de las acciones y abandonar su ubicación en el estadio un puñado de minutos antes del final, absolutamente convencido de que el equipo tucumano obtendría su primera victoria en la actual copa.

Y sin embargo, la igualdad sucedió. Esa jugada de pelota parada con doble cabezazo en el área, primero de Ignacio Maestro Puch en una pierna –acalambrado- y del chileno Mauricio Isla en segunda instancia le costó demasiado caro a un Atlético que hasta entonces había jugado un muy buen partido en el Libertadores de América.

Desconcentración en área propia y falta de contundencia en la ajena suele conformar un cóctel venenoso para cualquier equipo. En la noche de Avellaneda lo fue para el “decano”, que extendió a 13 los partidos sin victorias por Copa de la Liga (el último de la edición pasada y la totalidad de los disputados por el certamen en 2024).

Otra vez sopa. “En la mayoría de los partidos que jugamos muy bien, nos pasó lo mismo. Metimos un solo gol, pudimos hacer muchos más en casi todos los partidos. Y en una que nos descuidamos… tenemos que estar atentos al cien por ciento, hasta el último minuto”, lamentó Sava los puntos perdidos.

La sensación de partido ganado y la realidad de no haberlo sabido cerrar. Pasó en el 2-2 con Independiente Rivadavia y se repitió ante el “otro” Independiente, que insultado por sus propios hinchas y todo se las ingenió para igualar e incluso hasta lo pudo ganar en la última jugada. Esto último, sin duda es un demérito de Atlético.

“Cada vez que nos llegan nos convierten, no podemos relajarnos un segundo”, sentenció el entrenador en referencia a los partidos con la “lepra” mendocina y también con Banfield, que goleó 3-0 en el José Fierro.

Sava insistió sobre las fallas defensivas. “No nos podemos desconcentrar, nos han hecho goles de pelota parada también contra Banfield… lo estuvimos trabajando y hay que seguir. Excepto contra Talleres, cuando por ahí quedamos mal parados y lo corregimos charlando y viendo algunos videos, en estos partidos estuvimos bien”.

El otro aspecto en el “debe” es la contundencia. Parecía que los goles a granel frente a Defensores de Belgrano (4-0) en Copa Argentina habían destrabado la cuestión. Sin embargo, en Avellaneda la otra razón del postrero empate hay que encontrarla en la falta de contundencia.

Como reconoció el propio Sava, frente al equipo de Carlos Tevez no se generaron tantas situaciones como en partidos anteriores, en los que los arqueros rivales fueron figuras. Pero también es verdad que Mateo Coronel, Nicolás Servetto y Renzo Tesuri –sobre todo este último- estuvieron a punto de sentenciar la historia frente a un Independiente desordenado y nervioso.

“Tenemos que seguir ajustando detalles mínimos, practicando definición, porque en todos los partidos merecimos hacer muchos más goles. En cada entrenamiento, debemos acostumbrarnos a estar más frente al arco, con el arquero, en el área chica, el área grande”.

“Cuando yo llevaba dos o tres partidos sin hacer goles me pasaba toda la semana frente al arco, incluso sin arquero, practicando”, afirmó el otrora delantero y goleador.

Pese a la tristeza por la victoria que se escabulló como arena entre los dedos, Sava elogió a sus dirigidos. “Nada más para decir, hicimos un partido extraordinario”.

Para el entrenador, que no cree “ni en la buena ni en la mala suerte”, la receta para conseguir ese objeto de deseo llamado ‘primer triunfo en el torneo’ es solo una: trabajo.

“Creo en el trabajo, en querer mejorar, siempre se aprende, incluso de las derrotas. Yo soy de las personas que cree que siempre ganás si podés elaborar lo que te pasa, a nivel emocional, táctico, físico… en todo sentido”.

“Hay que pensar ahora en Gimnasia, es el partido que tenemos que ganar”, completó Sava.

Efectivamente, porque el tiempo se acaba y Atlético está a solo dos partidos de estampar una marca negativa en la que nadie quiere pensar en inmediaciones de 25 de Mayo y Chile: cerrar un campeonato sin victorias, por primera vez en la historia.

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