La sociedad asiste en estos días a fuertes disputas políticas y demandas judiciales por la distribución de alimentos destinados a sectores vulnerables. En el Ministerio de Capital Humano, organismo federal responsable de estas ayudas, han sido desplazados varios funcionaros, la misma ministra ha sido denunciada ante la Justicia y respaldada desde los más altos niveles del Gobierno y al mismo tiempo han sido cambiados los esquemas de distribución mediante un convenio con la Fundación Conin. Al referirse a esta polémica política, el Gobernador de Tucumán ha pedido prudencia. “Hay que tener mucho cuidado cuando opinamos. No nos olvidemos de que estamos hablando de un gobierno nacional que hace seis meses que asumió y uno provincial que hace siete meses asumió… situaciones como estas nos vamos a ir encontrando en el camino, como se encontró a nivel nacional, nosotros también hallamos obras paralizadas que no tenían el avance que deben tener y en seis meses de gobierno recién se está armando el organigrama y estructura”, describió.
Se trata de más de 5 millones de alimentos que se encontraban en depósitos en Villa Martelli (Buenos Aires) y en Tafí Viejo (Tucumán), parte de los cuales, según la denuncia, estaban en riesgo de vencimiento, motivo por el cual se hicieron allanamientos.El sábado pasado personal de Gendarmería acreditó en Tafí Viejo la existencia de más de 2.700.000 productos alimenticios entre los que se encuentran aceite de girasol, aceite mezcla, lentejas, garbanzos, leche en polvo, puré de tomate, pasta de maní y yerba mate. Mientras tanto, por dos semanas se hará la distribución de productos como leche en polvo que están cerca de su vencimiento. “Lo importante de esto es que el tema se está resolviendo. Si tuvo que intervenir la Justicia, lo hizo, el Gobierno nacional reaccionó y tomó decisión (de repartirlos) y desde Tucumán lo que podamos aportar y acompañar lo estamos haciendo”, añadió el gobernador.
La inquietud ha sido distinta en otros gobiernos de la región, que han alertado sobre los descensos de temperatura que indican la necesidad de tener planificada la entrega de kits de invierno y para personas en situación de calle y familias expuestas al frío invernal, además, de que reclamaron la atención de programas específicos para personas vulnerables. En este sentido, la responsable del Banco de Alimentos ha advertido que en el país “no falta comida, sino organización”.
Más allá del debate político, es de atender la emergencia en que se encuentran muchas personas en el país en estos momentos en que el informe del Observatorio de la Deuda Social Argentina que elabora la Universidad Católica Argentina (UCA) que estima que en la primera parte del año hubo un incremento del 11% en la tasa de pobreza, que llega al 55 por ciento, mientras que la indigencia pasó del 9,6 al 17,5 en el primer trimestre del 2024. La Iglesia ha advertido sobre esta situación y ha reclamado reacción por parte de la dirigencia política.
Se sabe que el Gobierno tucumano hasta ahora se ha hecho cargo de la crisis con los cambios en los sistemas de ayuda social implementados desde la Nación, y se están distribuyendo en la Provincia 1,1 millones de kilos, según dijo el ministro de Desarrollo Social. Sería importante que, ante los datos de las cifras de la pobreza y en la emergencia climática, se aceiten los mecanismos de prevención y de control de la distribución, en vista de que se está ejecutando un esquema de emergencia en medio de una crisis profunda.