Coordinar políticas entre municipalidades

Las zonas limítrofes entre diferentes administrativas, ya sea comunales o municipales, suelen mostrar las marcas del abandono; y la vida de las comunidades es ahí más compleja por falta de adecuados servicios. También sucede que esos límites marcan diferencias en la prestación de servicios entre una y otra área, que agrega inconvenientes a los que padecen los ciudadanos. De esta circunstancia especial se han ocupado en estos días los intendentes del Gran San Miguel de Tucumán, además de los jefes municipales de Famaillá y de Concepción. En el encuentro, convocado como conversatorio sobre gestión metropolitana, participaron, además de los funcionarios, urbanistas, especialistas que expusieron sus experiencias en otras provincias y los desafíos de gestionar áreas metropolitanas.

Los temas abordados son el transporte, el tratamiento de residuos sólidos urbanos, los recursos hídricos o el arbolado, entre otros como la iluminación o los vínculos de caminos, ciclovías y canales, y los servicios. La Capital es un gran núcleo que atrae población del área circundante y con ello el movimiento comercial y vehicular es intenso. Pero las llamadas “costuras” entre una jurisdicción y otra no son firmes. Hay diferencias de transportes con líneas urbanas e interurbanas de distintas prestaciones; sectores con servicios de salud deficientes; zonas de basurales constantemente levantados y vueltos a formar; sectores en los que necesariamente hace falta cooperación, como está ocurriendo ahora con la zona de los accesos a la capital, que está siendo objeto en las últimas semanas de un cuidado interjurisdicconal. También hay diferencias en la resolución de problemas similares, como por ejemplo el tratamiento de los residuos, pese a que en el Gran Tucumán se comparte la disposición final de la basura en el consorcio metropolitano.

“San Miguel de Tucumán se ha transformado en una gran ciudad y cada vez crece más. “Las experiencias exitosas son esas que dejaron de lado las banderías políticas a un costado y privilegiaron la gestión, las obras y los resultados. Son esas políticas públicas ampliadas las que mejoran la calidad de vida de la gente”, señaló el intendente yerbabuenense. La jefa municipal de Tafí Viejo explicó que se trazaron “algunos lineamientos para trabajar en una agenda común a fin de encontrar una salida colectiva”.

Entre otras cosas se relató la experiencia de una gestión en Mendoza, que coordina acciones de las autoridades y proyectos impulsados por la sociedad, con la idea de hacer frente a los retos de las aglomeraciones urbanas, más allá de los límites municipales. Uno de los urbanistas planteó que “el límite que nos separa no es un río, sino que tienen que ser elementos de unión”, reflexionó. La experiencia apunta a un necesario cambio de metodología de gestión en zonas que cada vez más van a terminar unificadas en una sola área urbana, de servicios y circulación comunes, que necesariamente deben ser equilibrados, cómodos y fluidos para la sociedad.