Por Marcelo Androetto
30 Julio 2024
MATÍAS NÁPOLI ESCALERO / ESPECIAL PARA LA GACETA
“Hay que pensar en la tabla de arriba y nos vamos a ir olvidando del descenso”. Inteligentísimo, Luis Miguel Rodríguez resumió en una frase el feliz momento por el que atraviesa Atlético Tucumán tras el reinicio de la Liga Profesional de Fútbol, que el equipo de Facundo Sava saldó con la conquista de siete puntos sobre nueve.
La sensación generalizada en el “Mundo Decano” tras la victoria sobre Barracas Central es que si la “nave” se estabiliza y sigue con su actual hoja de ruta, en el corto plazo el equipo del “comandante” Sava podría olvidarse definitivamente de las turbulencias propias de la zona baja para volar hacia las alturas de una tabla anual que clasifica para competencias internacionales.
Varios hechos respaldan esta posibilidad. El equipo ganó en confiabilidad. El empate 1-1 con Banfield a domicilio remontando un mal arranque de partido, más la agónica victoria 1-0 sobre Instituto de local después de solventar sin daño un penal en contra preanunciaban un viento de cola favorable para la visita al “Guapo”. Y la victoria 2-0 del lunes en Parque Patricios lo corroboró.
Hacía un año exacto, desde la recta final de la Liga 2023 en julio pasado, que Atlético no abrochaba dos victorias al hilo. Y salvo la goleada sobre Defensores de Belgrano por Copa Argentina en Santa Fe, en marzo, solo había ganado una vez en rodeo ajeno en los últimos 12 meses (a Gimnasia y Esgrima en La Plata, en noviembre, por la Copa de la Liga 2023).
“Conseguir dos victorias consecutivas nos da tranquilidad para seguir trabajando”, admitió Renzo Tesuri a LG Deportiva antes de abandonar el Palacio Tomás Adolfo Ducó. “Era muy importante ganar, ya que no veníamos sumando de a tres”, añadió Guillermo Acosta sobre la racha de resultados positivos que deja al “Deca” a cinco puntos de la cima de la actual Liga.
“Estamos en pleno crecimiento, se van dando los triunfos, nos vamos sintiendo cada vez mejor. Nos vamos a ir soltando y agarrando cada vez más confianza”, auguró Tesuri, quien ante Barracas estuvo varias veces cerca de convertir (fue el autor del empate ante el “Taladro”).
Desde los fríos números, se podría decir que Atlético está a mitad de camino entre el descenso y las copas internacionales. Once puntos lo separan del colista de la tabla anual (Central Córdoba) y otros tantos lo alejan momentáneamente de la zona de clasificación para la Sudamericana (el último es Unión, con un partido menos).
“Nuestro objetivo está más que claro, es intentar seguir por este camino. Jugando así van a ser más los partidos que vamos a ganar que los que vamos a perder y ahí tranquilamente te vas a ir metiendo en el pelotón de arriba”, argumentó Tesuri.
Para el volante, no hay dudas de que una de las claves de este presente hay que buscarlo en el regreso del “Pulga”. “Nos da mucha jerarquía, dentro de la cancha es un diferente, la pelota siempre te llega redonda”.
El “Bebe” Acosta también celebra la vuelta de Rodríguez. “Yo sabía que en algún momento iba a volver a su casa, hay que disfrutarlo y que él también pueda disfrutar. Sabemos lo que representa Luis para el plantel y para el club, sobre todo. Las cosas están encaminadas”.
El último mercado de pases parece haber sido promisorio para el “Deca” y no solo por el renovado aporte del “Pulga”. Matías de los Santos, Rodrigo Melo y Gino Peruzzi, cada uno con sus minutos en cancha (el último debutó con gol el lunes), han entregado buenas señales también.
Es cierto que está pendiente la cuestión de la permanencia o no de Joaquín Pereyra, como reconoció el propio Sava (“Vamos a ver qué pasa”). Reemplazar al habilidoso zurdo sin que el funcionamiento del equipo se resienta, supondría un desafío adicional para el entrenador.
Además, habrá que seguir gestionando los minutos en cancha del “Pulga”. A sus 39 años, y pese a mostrar un estado de forma impecable, el físico necesita un plus de cuidado. El lunes, una molestia en su posterior izquierdo generó preocupación al final del primer tiempo, aunque el tema aparentemente no pasó a mayores y pudo seguir jugando unos minutos más.
De cara al obstáculo que representa el próximo rival, Independiente Rivadavia (de buen andar en el certamen) el domingo en el José Fierro, en el seno del plantel reina el optimismo, aunque también se percibe mesura.
“Hay que continuar por este camino, seguir corrigiendo cosas y ojalá que podamos estar ahí hasta el final del torneo”, declaró Rodríguez.
El significado de ese “ahí” es explicado por el propio delantero y enciende la ilusión de los hinchas: “Tenemos que mirar hacia arriba, obviamente es más fácil pelear un campeonato que el descenso”. Palabra del “Pulga”.
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