Doce cuerdas para expresar la música del mundo en CiTá

Un recorrido por distintos ritmos con Allier Díaz Ferrer y Oscar Salvatierra.

SOLISTAS Y EN DÚO. Las guitarras de Allier Díaz Ferrer y Oscar Salvatierra. SOLISTAS Y EN DÚO. Las guitarras de Allier Díaz Ferrer y Oscar Salvatierra.

Las seis cuerdas unen a Allier Díaz Ferrer y a Oscar Salvatierra, como lo demostrarán esta noche cuando se presenten, desde las 21, en CiTá Abasto de Cultura (La Madrid 1.457).

“Concierto de guitarras” es el nombre genérico y compartido de un recital que tendrá la llamada “música del mundo”, como el flamenco, los ritmos latinoamericanos, lo académica, lo folclórico, el flamenco, el tango y un acercamiento al jazz. En el repertorio aparecerán temas de los maestros españoles Paco de Lucía y Tomatito y del argentino Luis Salinas.

“Todo será enmarcado en los estilos que cultivamos cada uno. Vamos a interpretar varias obras como solistas, pero creo que el momento de los dúos será muy importante, porque se va a generar ese encuentro de dos guitarras, dos estilos, dos modos de sentir la música que coexisten y confluyen, y resignifica lo que hacemos cada uno por separado. Es ahí donde coincidimos, con la conciencia de que la música es una sola, más allá de los estilos”, afirma el artista cubano radicado en Tucumán ya hace muchos años.

“Particularmente considero que el instrumento en la provincia goza de una salud estupenda, no solo por los nuevos guitarristas que constantemente nos sorprenden y que surgen de la escuela local, si no porque cuenta con un sinnúmero de intérpretes que son parte del abanico obligatorio de guitarras del país y del mundo”, agrega.

Por su parte, Salvatierra reivindica la unión de los distintos universos que habitan tanto él como Díaz Ferrer “con sus matices, sus similitudes, su diversidad... son dos caminos que se sumergieron en géneros muy intensos y viscerales”. “Allier es hoy un hermano más. Nos une una historia de amistad, familia y guitarras. Fue una gran inspiración escucharlo en mi infancia. En ese momento daba mis primeros pasos en la música por lo que tocar juntos por primera vez tiene un significado especial, tras 20 años con la guitarra en mano en mi caso”, destaca.

Coincidencias

Estar juntos en el escenario no significa mezclarse. “Siento que nos complementamos muy bien. Si bien tenemos grandes coincidencias en ese gran mundo al que definimos vagamente como fusión, nos diferenciamos claramente. Ponemos de nuestra identidad, nuestra manera de sentir e interpretar. El es un destacado guitarrista flamenco, con estudios clásicos y un profundo sentido por la música latinoamericana de su raíz. En mi caso, la vida me llevó a explorar profundos paisajes del folclore argentino, en especial los de mi Valle Calchaquí, pero también la bossa nova, lo clásico y el flamenco mismo, con tanto de intruso como de respetuoso”, aclara.

Y completa a modo de convocatoria y despedida: “dentro de esa simetría que conseguimos, cada uno pone lo que su pulsión le demanda. La música es una, y el mayor punto de encuentro es la libertad y el cariño por las cuerdas. Siento una gran motivación por este concierto, tiene encanto para quienes aman la música sin fronteras”.

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