En Tucumán, Ricardo Lorenzetti instó al Poder Judicial a “hacer una autocrítica”

El vocal de la Corte Suprema de Justicia de la Nación (CSJN), Ricardo Luis Lorenzetti, brindó una conferencia en Tucumán en la que instó al Poder Judicial a “hacer una autocrítica”.

“No se puede decidir basando en la sola autoridad, porque yo tengo el poder de hacerlo. Hay que explicar a la sociedad los argumentos; y los argumentos están: en la Constitución, en las leyes, en los precedentes. No es un tema menor, sino de funcionamiento y de legitimidad del Poder Judicial, en todos los niveles”, afirmó el magistrado sobre el cierre de una exposición que se extendió durante cerca de una hora.

El evento se celebró en el marco de los actos por el 124 aniversario del natalicio de Juan Bautista Alberdi, y estuvo encabezado por los miembros del máximo tribunal de Tucumán, Daniel Leiva (presidente), Antonio Estofán (vocal decano), Claudia Sbdar y Daniel Posse. Asistieron además magistrados y magistradas de la Justicia provincial y federal, al igual que las representantes del Ministerio Fiscal, Estela Giffoniello, y del Ministerio de la Defensa, y María Marta Contreras Cuenca.

Tras dar inicio a la conferencia, titulada “El Código Civil y Comercial y la labor del Poder Judicial”, Lorenzetti señaló a la Corte de Tucumán como “un ejemplo a nivel nacional en materia de gestión y tecnología”. Luego, destacó la figura de Alberdi y de la “visión federal” que legó al país.

En su mensaje, marcó que el Código Civil y Comercial de la Nación (CCyCN) está próximo a cumplir una década de su sanción, y valoró que se trata de “una obra colectiva”. Puso sobre relieve además la trascendencia de ese texto normativo, al punto de que fue traducido a varios idiomas. “Es la primera vez que nosotros exportamos ideas, y no sólo las importamos, que es nuestra tradición jurídica”, dijo.

Lorenzetti aludió al “trabajo de consenso” entre los distintos sectores. “Es un aspecto relevante. Cuando trabajamos en familia, piensen que es el Código tal vez más liberal en esta materia de los derechos existentes, y esto se hizo e un diálogo profundo con todos los sectores, incluida la Iglesia. Sosteníamos que la función del legislador no es imponer un modelo a la población acerca de cómo organizar su vida, sino darles opciones para que cada persona, cada hombre, cada mujer de este país organice su vida como desea”, contó.

Lorenzetti describió el CCyCN como “un código para resolver casos, pensado en la práctica; no para la teoría abstracta, para discutir el sexo de los ángeles”. Y agregó que “ha sido pensado para que logremos solucionar problemas y conflictos de nuestra gente, que tanto lo necesita”.

En la conferencia, repasó distintos votos que ha dictado en casos tratados por el máximo tribunal en diversas materias. “Estoy en una campaña para que el Poder Judicial escriba razones por las cuales resuelve, y que sean entendidas por la población”, afirmó.

Tras repasar y explicar aquellos antecedentes, Lorenzetti ponderó la aceptación que tuvo el CCyCN. “Había mucha discusión acerca de los grandes conflictos que iba a generar; y la mayor novedad fue que no generó conflictos”, dijo. Y consideró que esto se debió a la tarea de los distintos actores del sistema judicial y también de las universidades, que adaptaron sus planes de estudio. “Hoy, la población lo usa sin ningún problema en la vida cotidiana”, sostuvo.

En el último tramo de su alocución, Lorenzetti insistió con la importancia de la argumentación y la explicación. “Vivimos en un momento difícil en la humanidad, donde los poderes judiciales están en cuestión en todos los países”, expresó. Consideró que este conflicto “tiene que ver con un problema central, y es que está cambiando aceleradamente el estatuto del poder”. En esa línea, indicó que los poderes Ejecutivo y Legislativo “están sometidos a procesos electorales”, y esto representa una dificultad a la hora de “resolver grandes problemas”. “Nadie quiere ganar una elección ofreciendo costos; los grandes problemas incluyen costos, y las elecciones se ganan prometiendo beneficios”, aseveró. Aquellos conflictos, entonces, terminan en la órbita judicial, y describió cómo eso lleva a que se plantee la legitimidad de los tribunales, al punto de que en ciertos países, como México,  se debaten propuestas para someter a elección a los miembros de la Justicia. “Cuando se habla de que los poderes judiciales tienen buena o mala imagen, es un error; porque si los poderes judiciales siguen las encuestas, se asemejarán mucho a lo que tienen que hacer los otros poderes, que es legítimo que sigan encuestas, pero los poderes judiciales no gobiernan, no deben seguir las encuestas ni la aprobación popular, sino el prestigio, que es seguir la Constitución y las leyes”, describió.  En ese sentido, Lorenzetti dijo que la función de la Justicia es “establecer límites al poder” y “la protección de los derechos de los ciudadanos”. “Ahora bien, si eso lo basamos solamente en nuestra autoridad, no funciona”, afirmó.