La contundente sentencia de Diego Barrado: “Quiero que Atlético Tucumán gane todo lo que juega”

Diego Armando Barrado, actual técnico de la Reserva de Atlético Tucumán, no puede evitar sonreír al recordar uno de los partidos más importantes de su carrera: la victoria de Atlético sobre River en el Monumental en 2011. Histórica por el resultado y especial para él por haber surgido de las inferiores del “Millonario”.

Ese 2-0 quedó grabado en su memoria y en las de muchos hinchas. “Me acuerdo todo. Cada año se me recuerda porque te mandan los goles y me tocó tener una buena actuación, así que uno se acuerda de todo, lo tenés muy presente”, comenta Barrado, una de las figuras de ese juego. “El partido nos salió como lo habíamos pensado. Fue redonda toda la jornada”, añade.

El contexto del partido -del que no muchos recuerdan- le dio un sabor especial al triunfo. “Era el primer partido que River jugaba con público después de cuatro o cinco fechas que le habían cerrado el estadio”, recuerda Barrado. “Y había muchísima gente de Atlético. Eso sorprendió mucho en ese momento”, agregó. La presencia masiva de los hinchas “decanos” en una cancha tan emblemática como la de River es algo que todavía habita la memoria del DT. “Para nosotros fue hermoso”, admite aún sorprendido.

Barrado no solo tiene una conexión profunda con Atlético, sino también con River, club en el que jugó durante varios años, por lo que sabe en primera persona el significado de jugar en el Monumental. “Era mágico, un sueño, por toda la gente que había, cómo alentaba, y uno se siente como que tiene un jugador más con el aliento. Me acuerdo que el ‘Chacho’ Coudet una vez me dice: ‘vos tirás dos centros, aunque sean malos y la gente empieza a saltar y cantar y mete al rival en la cancha’”, recordó.

A pesar del ambiente desafiante que ofrece el Monumental, Barrado reconoce que el plantel de Facundo Sava debería plantear el partido de la misma forma que aquel del “Chocho” Llop. “Nosotros estábamos bien concentrados cuando fuimos. Sabíamos que ellos atacaban mucho, pero también sabíamos que si los atacábamos rápido los podíamos lastimar”, reflexiona Barrado, quien destaca cómo la presión que sentía River en ese momento jugó a favor de Atlético. “Cuando las cosas no le empiezan a salir, la desesperación se apodera de los jugadores y el rival tiene que aprovechar eso”, explica.

La victoria de Atlético en esa tarde fue en parte gracias a las actuaciones de jugadores que hoy son leyendas del club, como Luis “Pulga” Rodríguez, Deivis Barone y Sebastián Longo. “Pulga, en ese momento, ya iba a convertirse en un ídolo del club por todo lo que había hecho. Era un jugador diferente. Siempre sabías que en algún momento iba a hacer algo que te dejaba de cara al gol”, comenta Barrado. “Hoy con 39 años, el aura que tiene se nota y la gente se siente representada por él”, acotó.

El tiempo ha pasado, y aunque muchos de los jugadores de aquel equipo ya están retirados, “Pulga” sigue activo. “Es el único, es un genio”, dice Barrado con admiración. “Nosotros ya estamos con un pie en la jubilación y el sigue ahí rompiéndola en la cancha”, bromeó.

Esta noche, cuando el árbitro Sebastián Zunino marque el inicio del partido, Diego estará frente al TV solo con su alma. “Me gusta verlo concentrado. Es una linda oportunidad porque Atlético llega en un muy buen momento. Siempre es una buena medida enfrentarlos. Es un momento bueno para hacerlo”, añadió.

Barrado dejó en claro dónde está su corazón cuando se trata de elegir entre Atlético y River. “Lo que fui o lo que soy se lo debo a River, pero hoy estoy defendiendo la camiseta de Atlético y quiero que le vaya bien. Cuando le va bien al equipo de Primera, el ambiente es diferente, y tenemos que hacer fuerza desde nuestros lugares para que eso pase”, dijo.

Barrado es un hombre que, a pesar de haber pasado por diferentes clubes, tiene un vínculo especial con Atlético, un club que sigue siendo su casa y al que sigue apoyando desde su rol como técnico. Aquel partido contra River en 2011 es solo uno de los tantos momentos que lo unen al “decano”, pero para él, sigue siendo un recuerdo imborrable de una de las victorias más significativas en la historia del club.