El fiscal federal Pedro Simón investiga el pequeño paraje El Palomar de Santiago del Estero, que recibió el viernes una “marea” de vinaza a través de un canal de riego que nace en Tucumán y que desemboca allí. Mientras tanto, la subsecretaría de Medio Ambiente de la provincia desmintió que se haya tratado de un caso de contaminación.
El viernes, una persona se presentó ante las autoridades para denunciar que algo malo estaba pasando en el fondo de su vivienda. Dijo que de un momento a otro, comenzó a sentir un olor pestilente y que la laguna que estaba en la parte trasera de su casa se había llenado de un líquido color marrón maloliente. Las autoridades, al verificar la información de la denunciante, dieron intervención a la Justicia federal.
Entre otras medidas, el fiscal ordenó a personal de Gendarmería Nacional que hiciera un relevamiento de la zona, tomara muestras de agua y que, mediante imágenes satelitales, tratara de establecer el recorrido de los residuos industriales.
La teoría que manejan los investigadores es que, aprovechando las lluvias de la semana pasada y la crecida de arroyos y ríos de la provincia, los industriales decidieron arrojar residuos para que se diluya con el mayor caudal del agua. La semana pasada, se registró una mortandad de peces en la desembocadura del río Salí en el lago El Frontal. Los pescadores dijeron que el desastre ambiental habría estado relacionado a la creciente que tuvo el Salí.
“Se equivocan si piensan que no habrá consecuencias porque tanto las autoridades administrativas como la Justicia vamos a actuar y si se encuentra a los culpables, vamos a imputarlos y a procurar que se les aplique todo el peso de la ley”, aseguró Simón en una nota publicada por el diario “El Liberal”.
Otra versión
La Secretaría de Estado de Producción, a cargo de Eduardo Castro, realizó inspecciones en los canales de riego de la provincia. El objetivo fue evaluar las consecuencias de las fuertes lluvias registradas entre los días 8 y 10 de octubre y como resultado no se registraron residuos compatibles con vinaza.
Durante las inspecciones, se realizaron exámenes de conductividad en los canales. Y como resultado, en general se observó una creciente importante demostrada por la vegetación caída, volcada por el paso del agua, causando un gran arrastre de sedimentos.
“Personal de la Dirección de Protección Ambiental de la Subsecretaría de Medio Ambiente revisó los sitios de disposición de vinaza de los ingenios que operan en la zona. Aunque las muestras tomadas aún se encuentran en proceso de análisis, no se encontraron a simple vista residuos compatibles con vinaza”, se puede leer en el documento. Simón también adelantó que una vez que tenga los resultados de los estudios, definirá cuáles serán los pasos a tomar.
En el comunicado dado a conocer por la secretaría de la Producción, los técnicos concluyeron que el fenómeno observado “se debió a una creciente súbita producto de la escorrentía superficial ocasionada por las intensas lluvias. Según datos de la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres, la zona afectada recibió entre 100 y 140 milímetros de precipitación en esos tres días, siendo el tercer día el que tuvo mayor acumulación de lluvias”
El pueblo de El Palomar fue protagonista de un hecho histórico en el NOA. A fines de 2011 y principio de 2012, el ingenio La Florida, del grupo Los Balcanes, volcó millones de litros de vinaza que llegó a la población. El fiscal federal de Tucumán Carlos Brito investigó y logró que Jorge Rocchia Ferro y el gerente de la planta Roberto Coronel fueran enjuiciados por delitos ambientales al haber liberado más de 50 millones de litros de vinaza al canal interprovincial del Este. En mayo de 2023, un tribunal integrado por Abelardo Basbús, Federico Bothamley y Mario Martínez, condenó a los dos acusados a tres años de prisión condicional y el pago de multas a Rocchia Ferro por $ 100.000 y a Coronel, $ 85.000.