Por Gustavo Rodríguez
20 Marzo 2025
En la presentación que realizó la Fiscalía de Estado ante el Ministerio Público Fiscal aparece la desgrabación del audio que supuestamente envió Miguel “Miguelón” Figueroa para intimidar al gobernador, Osvaldo Jaldo, y a cinco funcionarios judiciales. Ese documento sirve para entender muchas cuestiones que deberán ser analizadas. Estas son algunas de las respuestas que se pueden encontrar sobre este caso:
- ¿Cómo se gestó el mensaje?
- Aparentemente, “Miguelón” se comunicó con una mujer y habló durante un par de minutos. Esta lo grabó y luego se la pasó a la periodista Mariana Romero, quien llevó el audio a las autoridades.
- ¿Habría estado planificado enviar este mensaje?
- Los investigadores creen que sí. Basan esa sospecha en el final del audio. En esa parte se escucha a una mujer preguntándole si ya había terminado y, después, el supuesto autor le pregunta qué duración tenía.
- ¿Ya fue identificada la mujer?
- En principio sí, se sospecha que es una de sus parejas. “Miguelón” mantenía varias relaciones sentimentales. Incluso, una de ellas, Jimena Fernández fue condenada a perpetua por el crimen de Ramiro Ledesma. Ella dijo que él la obligó a citar a la víctima para que lo asesinara.
- ¿Qué puede haber motivado a Figueroa hacer esta amenaza?
- Todo parecería indicar que lo hizo para vengarse por la muerte de su hijo. En el audio indicó que el joven había intentado suicidarse hace un mes y que le negaron tener un acercamiento con él. Finalmente el chico, que tenía severos problemas de adicción, terminó quitándose la vida. Desde ese momento comenzó los trámites para que le permitieran viajar de Buenos Aires, donde está el penal de Marcos Paz, a Tucumán.
- ¿Es cierto que además de amenazar realizó denuncias?
- Sí, acusó al gobernador Jaldo de tener vínculos narcos en sociedad con otros mandatarios de las provincias del NOA. No sólo no presentó ninguna prueba sobre esta cuestión, sino que además mintió que ya había denunciado este tema en los juicios que realizaron en su contra.
- ¿Fue casual la elección de las personas que decidió intimidar?
- Para nada. Carlos Sale e Ignacio López Bustos fueron los fiscales que lograron que Figueroa recibiera dos condenas a perpetuas (luego una de ellas fue anulada por un tribunal de Impugnación). El juez de Ejecución Gonzalo Ortega rechazó los planteos en los que solicitó regresar a la provincia. A Jaldo lo sindicó por haber realizado movimientos políticos para que fuera condenado y por aprobar su traslado a un penal de máxima seguridad. Él dijo que fue para que no hablara, las autoridades argumentaron que fue porque descubrieron que estaba planeando su fuga. El caso de Pedro Gallo, es al menos curioso: pasó a integrar esta lista por haber reemplazado a López Bustos en una de las fiscalías de Homicidios.
- ¿Qué tipo de mensaje intimidatorio envió?
- Si bien es cierto es que en varias partes apuntó que sus palabras no debían ser consideradas como amenaza, Figueroa insinuó que los cinco entenderían lo que él está viviendo cuando le maten a un hermano, se le muera la madre o un hijo.
- ¿Por qué se habla de que podría haber más personas implicadas?
- Ya se sabe que contó con la colaboración de una persona que grabó un mensaje que luego fue enviado para que fuera difundido. Los investigadores sostienen que podría haber recibido algún tipo de asesoramiento porque el audio, de alguna manera, revela que tomó algunos recaudos para evitar tener problemas legales.
- ¿Por qué se dice que se perjudicó él mismo?
- Al intentar plantear la línea narco, reconoció haber estado implicado en el tráfico de drogas a gran escala. Figueroa siempre dijo que no tenía ningún vínculo con esa actividad ilícita y que en realidad él se dedicaba a la compraventa de chatarras. Además, al ser acusado de haber enviado ese audio, fue trasladado al penal de Ezeiza, cárcel que tiene un régimen de encierro mucho más riguroso.
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