En el universo de la Fórmula 1, un nuevo foco de atención crece fuera de las pistas: las F1 WAGs. Este término cada vez se está popularizando más en redes sociales, especialmente cuando nos referimos a las novias de los pilotos. Es acrónimo de "Wives and Girlfriends" (esposas y novias) y se utilizaba a principios de los 2000 para referirse a figuras como Giselle Bündchen o Victoria Beckham, como parejas de deportistas de élite.
Sin embargo, a diferencia de las esposas de futbolistas u otros deportes, las parejas de los pilotos de Fórmula 1 se caracterizan por un perfil mucho más discreto. No suelen estar involucradas en escándalos ni deben ser el centro de la escena. Ellas acompañan desde un segundo plano, pero con una presencia cada vez más influyente. Probablemente, ese perfil bajo y misterioso, combinado con su elegancia natural, sea una de las claves por las que hoy se convirtieron en un fenómeno del que todos quieren saber más.
Esta actitud, no es casual. En la Fórmula 1, el silencio también es parte del código. Se trata de un mundo que valora la elegancia contenida, la cual no necesita ser ostentada. Incluso, esto también se puede ver en la moda: mostrar logos o marcas de forma demasiado evidente es visto como una falta de estilo. Y esa misma lógica se traslada a la vida privada. Se espera que los pilotos y su entorno mantengan una imagen cuidada, sin excesos ni exposición innecesaria. El verdadero lujo, al fin y al cabo, es silencioso.
En ese contexto, las WAGs de la F1 se consolidaron como figuras con identidad propia. Aunque en las pistas sean acompañantes, muchas de ellas desarrollan sus propias carreras profesionales y se mueven en esferas de alto rendimiento. Algunas estudian, otras trabajan. Ese perfil culto -y cercano al deporte pero alejado de los chismes- también despertó el interés de muchas marcas, que las ven como aliadas de lujo para sus estrategias de comunicación.
Entre las más seguidas y mencionadas está Kelly Piquet, pareja de Max Verstappen. Lleva la realeza de la Fórmula 1 en la sangre: es hija del tricampeón Nelson Piquet y construyó su propio camino dentro del mundo del automovilismo y la moda. Tuvo una infancia y adolescencia cosmopolita entre Mónaco, Francia, Brasil e Inglaterra, estudió Relaciones Internacionales en Nueva York y trabajó en el área de comunicación de revistas de moda y organizaciones deportivas. Es madre de su primera hija, Penélope, qué tuvo junto a su exnovio el piloto Daniil Kvyat. Y hace solo unas semanas, tuvo a su segunda hija, Lily, junto a Verstappen.
Si bien no es el mejor ejemplo para comenzar a hablar de perfil bajo —estuvo en el ojo de la tormenta en más de una ocasión—, sus situaciones nunca llegaron a ser escandalosas en sentido estricto. Pero, en un entorno tan controlado como el de la Fórmula 1, cualquier exposición puede ser vista como disruptiva. Más allá de su vínculo sentimental, es considerada por muchos como la It Girl original de la F1. En su cuenta de Instagram, donde supera el millón de seguidores, muestra su vida entre viajes, aviones privados, yates y alfombras rojas.
Otra de las que ganó popularidad en redes últimamente es Alexandra Saint Mleux, pareja de Charles Leclerc. Estudió historia del arte en la École du Louvre, lo que le da una formación sólida en arte moderno y contemporáneo, algo que se refleja en su mirada estética y en su forma de vestir. Difícil imaginar una combinación más refinada.
Su primera aparición pública fue en 2023, pero rápidamente se convirtió en una de las WAGs favoritas por su su carisma sencillo y, como referente en la moda, por su estilo relajado y elegante. Alejada de los excesos, combina prendas de pasarela con naturalidad y ya fue convocada por las marcas del momento para campañas internacionales, como es el caso de Rhode de Hailey Bieber. Alexandra es una de las nuevas figuras del entorno de la F1 que logró instalarse sin hacer ruido, solo con consistencia y una imagen muy cuidada.
Lily Muni He, pareja del piloto Alex Albon, tiene una de las trayectorias más destacadas entre las WAGs del circuito. Al igual que su pareja, es deportista profesional. Comenzó a jugar al golf desde muy pequeña y, con solo 16 años, ya se había clasificado para el U.S. Women’s Open, y desde sus 18 años compite en el LPGA Tour.
Nació en China, y se crio entre Canadá y Estados Unidos. STrabaja junto con marcas como Nike, TAG Heuer y Red Bull, y participó en campañas para firmas de lujo como Prada y Burberry. En redes sociales comparte contenido de su estilo de vida, combinando el deporte con lookazos de moda. Su perfil trasciende cualquier vínculo romántico: es una figura destacada por mérito propio.
Por otro lado, Francisca "Kika" Cerqueira Gomes, novia del piloto Pierre Gasly, lleva la exposición en la sangre. Nació en Portugal y es hija de una presentadora de televisión y del expiloto Gonçalo Gomes, lo que la acercó desde niña tanto a las cámaras como al mundo del automovilismo. Trabaja como modelo e influencer, y desfiló para marcas reconocidas y fue tapa de varias revistas.
En redes comparte imágenes de sus viajes y estilo de vida junto con contenido de estilo editorial. Es una de las presencias más fotografiadas del paddock, y de las favoritas en Instagram. Se destaca por un perfil parecido al de Alexandra, con frescura y elegancia tanto en los circuitos como fuera de ellos.
Estas son solo algunas de las mujeres que forman parte de este selecto círculo, pero la lista continúa. Entre ellas están Rebecca Donaldson, pareja de Carlos Sainz Jr, Carmen Montero Mundt, pareja de George Russell y Heidi Berger, pareja de Daniel Ricciardo. En todos los casos, estas mujeres lograron construir un fandom que las llevó a ser una celebridades más allá de su relación sentimental.




















