La “perversa” necesidad de llegar con equilibrio fiscal a la primavera electoral

Javier Milei no hizo diferencias; trató a todos por igual. Los calificó de “perversos” ya que, a su entender, el presidente de la Nación considera que todos los gobernadores se niegan a aplicar la motosierra en sus distritos. Como prueba, expuso que, mientras el Gobierno nacional avanza hacia la simplificación del sistema tributario, en los distritos subnacionales, en cambio, se aprovecha esta baja de la carga fiscal para incrementar algunos impuestos distorsivos, como Ingresos Brutos

“El ajuste no es acompañado ni por las provincias ni por los municipios, que siguen manteniendo los mismos niveles en términos de PBI desde que asumimos, es decir que ha habido motosierra en la Nación y no en las provincias ni en municipios”, manifestó este viernes el mandatario nacional durante el almuerzo ofrecido por el Jockey Club Buenos Aires.

En Tucumán, esperan definiciones de la Casa Rosada. Osvaldo Jaldo no viajó a la Sociedad Rural, donde sí estuvieron con el jefe de Gabinete Guillermo Francos otros gobernadores dialoguistas. Aguarda que la Nación cumpla con la palabra empeñada para continuar con las obras públicas que arrancaron con fondos propios, pero que, si no llegan las partidas prometidas, terminarán consumiendo el ahorro acumulado a lo largo de estos 21 meses de gestión gubernamental. El Fondo Anticíclico se está esfumando. El Poder Ejecutivo había logrado acumular poco más de $ 250.000 millones al cierre del período 2024, pero aquellos trabajos públicos, las necesidades de servicios y las paritarias terminaron consumiendo gran parte de los ahorros. “Nosotros sí hicimos los deberes, incluso antes de que Milei asumiera como presidente de la Nación”, se atajan en la Casa de Gobierno ante las críticas del economista libertario.

La carga salarial sigue creciendo. Con el último acuerdo con los gremios estatales, la planilla salarial mensual ya supera los $ 183.000 millones mensuales para cubrir las obligaciones salariales de unos 132.000 empleados públicos (incluyendo municipios y comunas rurales). La cifra prácticamente duplica la recaudación promedio mensual de la Dirección General de Rentas. El 66% de aquella planilla de sueldos se reparte entre docentes, personal de salud y efectivos policiales. Un poco más atrás se ubican las remuneraciones del Poder Judicial, de acuerdo con los datos de la Contaduría General de la Provincia.

Con Cristina Fernández de Kirchner fuera de la escena electoral, los gobernadores pasaron a constituirse en los principales rivales para la elección del 26 de octubre próximo. Jaldo, en ese sentido, preserva el discurso público en contra del Presidente. “No pedimos recursos nacionales. Le estamos pidiendo al Gobierno nacional que no tenga superávit con recursos nuestros que no sacrifiquemos a los tucumanos”, afirmó, días pasados, el gobernador de la provincia, al referirse a las constantes críticas libertarias acerca de los proyectos que las provincias impulsan en el Congreso, con el fin de que se distribuya lo recaudado por el impuesto a los Combustibles y los Aportes del Tesoro Nacional (ATN) como una suerte de compensación ante la caída de la recaudación por falta de actividad económica.

En la Casa de Gobierno tucumana sostienen que la generalización que hizo el jefe de Estado respecto de la conducta de las provincias frente al equilibrio fiscal no es correcta. De hecho, un diagnóstico reciente del Ministerio de Economía señala que Tucumán está a un punto de cumplir la tercera medida establecida en el Pacto de Mayo: “la reducción del gasto público en torno al 25% del Producto Bruto”. Asimismo, consideran que están en línea también con el segundo punto de aquel acuerdo firmado hace un año en la Casa Histórica: “el equilibrio fiscal es innegociable”.

Los resultados fiscales del primer trimestre del año han encendido una luz amarilla. Los datos difundidos por la consultora Politikon Chaco, sobre un informe de la Dirección Nacional de Asuntos Provinciales muestran que 15 jurisdicciones presentaron superávit financiero, con Ciudad Autónoma de Buenos Aires a la cabeza (29,4%) acompañada en el podio por Jujuy (26,4%) y Santiago del Estero (21,2%); por el contrario, ocho provincias cerraron el trimestre con déficit financiero; entre estos, los de Santa Cruz (-4,1%) y Corrientes (-9%) fueron los más profundos. Tucumán se ubica en este último lote, aunque el rojo fiscal es marginal (del 0,8%), lo que no pone en peligro el equilibrio fiscal. En ese período se evidenció la baja en la recaudación de impuestos provinciales por la caída de la actividad, más aún cuando es prácticamente nula en el distrito. De todas maneras, desde la cartera que conduce Daniel Abad señalan que en el último año, la provincia ha sostenido el superávit financiero, lo que lleva al cumplimiento de las metas pactadas con el Gobierno nacional. Otra cuestión que explica aquel rojo transitorio fue la disponibilidad de recursos que el Estado provincial ha realizado para sostener los programas alimentarios en un período de receso escolar, particularmente en sectores sociales más vulnerables. Además, pese al corte en el envío de remesas nacionales, en la provincia no se ha detenido la obra pública.

El Fondo Anticíclico, precisamente, permitió encarrilar las finanzas públicas, aunque el margen de acumulación de ahorro fiscal es cada vez menor, debido a las crecientes necesidades financieras para sostener los servicios públicos básicos.

La semana que arranca será decisiva para el Gobierno tucumano. Jaldo volverá a encontrarse con el senador Juan Manzur, con el objetivo de definir si habrá unidad en el oficialismo hacia las próximas elecciones. Estos encuentros han despertado cierto resquemor en la Casa Rosada. El gobernador tucumano ha dejado en claro, en las últimas charlas con funcionarios nacionales, que lo institucional y lo político corren por cuerdas separadas, aunque el rol dialoguista seguirá presente toda vez que Milei requiera apoyo parlamentario.

Desde el punto de vista de la gestión, el ministro de Economía viajará a Buenos Aires para saber si la Nación cumplirá las promesas realizadas para la ejecución de obras públicas en territorio tucumano. Los últimos contactos con los colaboradores de Milei han dado señales en ese sentido. Sin embargo, las declaraciones del Presidente volvieron a encender las dudas. Entre los gobernadores siguen las conversaciones telefónicas casi con la misma conclusión: el corte de partidas y el freno en las tratativas por proyectos que requieren financiamiento federal fue general.

Más allá de todo esto, hay autonomía financiera en la provincia para pasar el invierno y llegar hasta la primavera electoral.