Jaldo vs Milei en Tucumán: la batalla por los votos con la oposición fragmentada

Con el peronismo unido detrás de su candidatura, el gobernador encara la campaña frente al Presidente, que apuesta a su propia figura para traccionar sufragios.

Javier Milei y Osvaldo Jaldo. Javier Milei y Osvaldo Jaldo. ENTERATENOTICIAS.COM.AR

El cierre de listas se avecina y las fuerzas políticas terminan de definir candidatos, estrategias y alianzas. Osvaldo Jaldo consiguió lo que quería y el peronismo anti-Milei también: el peronismo tucumano irá unido en una sola lista, con el gobernador encabezando la nómina y encolumnando a todos detrás de él. Con esta movida, son cada vez más los que se arriesgan a especular con lo que ya se había adelantado en esta misma columna. Crece la sensación entre los líderes más experimentados -del oficialismo y de la oposición- de que, ante el panorama actual, Jaldo está más cerca de quedarse con tres bancas que cualquier otra fuerza de arrebatarle la victoria.

Los peronistas anti-Milei también salieron triunfantes. Se aseguran una banca en el Congreso para mantener su oposición a las medidas de Javier Milei, lejos del dialoguismo que, por ejemplo, mostró el gobernador. En ese sector están conformes con la inclusión de Javier Noguera en un tercer lugar, que les garantiza sumar un voto opositor al Gobierno nacional y sostener la postura que Pablo Yedlin y Carlos Cisneros vienen mostrando en Diputados. También entienden que es el jaldismo el que se acercó al tono confrontativo contra la Casa Rosada que este grupo venía esbozando.

Juntos, pero separados

Ayer, temprano en la Casa de Gobierno, Jaldo departió con el senador Juan Manzur. Más tarde, Noguera y Yedlin estuvieron en el acto de relanzamiento del Procrear II. En el caso del médico, hacía más de un año que no participaba en un acto público organizado por el oficialismo provincial. Ahora sí, la paz parece sellada. Un detalle no menor es que, según trascendió, Jaldo se reunió por separado con Manzur y también a solas semanas antes con el exintendente de Tafí Viejo. Ayer, los dirigentes anti-Milei tampoco se mostraron juntos. El senador nacional ya no parece ser el líder que supo aglutinar la resistencia interna: había decepcionado al comienzo de la gestión del tranqueño, cuando muchos esperaban que él los cobijara después de aquella feroz interna. Eso no sucedió. Esta vez, el exmandatario habría velado más por sus propios intereses que por los del grupo, lo que terminó por horadar la solidez que alguna vez tuvo.

Mucha agua correrá bajo el puente justicialista de aquí a 2027.

Papelitos de colores

El vicejefe de Gabinete de la Nación, Lisandro Catalán, salió a responderle con crudeza a Jaldo y su “tijera para Milei”. Le contestó que ellos tenían la “motosierra” para el gasto público, lo que evidencia que la campaña es cada vez menos amable, por más que se esfuercen por ser cordiales cuando se les pregunta por la relación institucional entre ambos.

Tal como se venía advirtiendo, el tucumano no sería candidato. Catalán es una pieza clave en la estructura de la Casa Rosada, encargado de dialogar con gobernadores y diputados opositores para sumar votos. Con los tiempos que se avecinan en el recinto, se mantendrá cerca de la Plaza de los Dos Congresos.

Entre Federico Pelli y Manuel Guisone se definirá la cabeza de lista. Según con quién se charle, señalan a uno u otro como el postulante. Pelli tendría una ventaja en cuanto a conocimiento público y capacidad discursiva, mientras que Guisone cuenta con la total confianza de los libertarios.

Más allá de los nombres, se espera que el propio Milei encabece la campaña aquí y en gran parte del país. Será él quien pida los votos para La Libertad Avanza en Tucumán. Está previsto que llegue a la provincia el mes que viene para levantarles la mano a sus candidatos. La apuesta de los libertarios es que la figura del Presidente traccione los votos.

Aquí será clave la estrategia para la boleta única de papel: en ella solo puede estar la foto del postulante, algo que beneficiaría a Jaldo, de buena imagen y alto conocimiento. Sin embargo, podría perjudicar a LLA, con candidatos poco instalados. Es probable que busquen potenciar el color morado y pedir a los votantes que identifiquen ese tono y el escudo partidario. Habrá que ver cuál estrategia resulta más exitosa.

A todo o nada

La dispersión opositora también genera incertidumbre. Roberto Sánchez posee niveles de conocimiento e imagen positiva elevados, pero no así la UCR, dañada como estructura por sus peleas internas. El exintendente de Concepción se entusiasma con poder pararse en el medio del ring electoral, lejos de las posturas extremas de mileístas y peronistas. Habrá que ver cómo reacciona un electorado que viene mostrando una marcada preferencia por liderazgos confrontativos.

Además, la fragmentación del mismo espectro político es un riesgo para todos: a las ofertas de LLA y de Juntos por el Cambio se suman las de CREO y Fuerza Republicana. Los votos que cada uno obtenga por separado podrían ser insuficientes, mientras que unidos habrían tenido un peso significativo.

El juego, hasta aquí, beneficia a Jaldo. No solo logró unificar al peronismo, sino que también arengó y obtuvo el compromiso de los intendentes para que trabajen por su candidatura. Siendo él el candidato, no habrá margen para que ningún jefe municipal se haga el distraído. Quedó claro en la reunión de la que ofició como anfitrión Darío Monteros: habrá que salir a militar, caminar los barrios y garantizar los votos. Quienes muestren una mejor performance en sus distritos quedarán mejor posicionados para 2027. Ese año quizás se vote con otro sistema y es probable que la cantidad de acoples sea limitada, una idea que también da vueltas en la cabeza de los líderes territoriales. No pueden arriesgarse a que les vaya mal este año, porque el “castigo” podría ser no tener la oportunidad de un acople ni el paraguas de la lista oficial.

El juego de la política está en marcha.

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