EN LA GACETA. Agüero representará al país en un evento en Uruguay. LA GACETA / FOTOS DE OSVALDO RIPOLL
“En la tecnología también hay atletas. Entrenamos, estudiamos, nos preparamos durante años, y cuando llega esta oportunidad, uno siente mucho orgullo”, cuenta a LA GACETA César Gustavo Agüero, mientras repasa los últimos detalles del viaje. En pocos días partirá hacia Montevideo, Uruguay, donde representará a la Argentina en el Simposio de Ciberseguridad 2025 de la Organización de Estados Americanos (OEA), el organismo que reúne a los 35 países de América y promueve la cooperación en democracia, derechos humanos, desarrollo y seguridad.
El encuentro es organizado por la Secretaría de Seguridad Multidimensional, la Secretaria Ejecutiva del Comité Interamericano contra el Terrorismo (Cicte) y su Sección de Ciberseguridad, junto a la Agencia de Gobierno Electrónico y Sociedad de la Información (Agesic) de Uruguay. Reunirá a expertos del sector público, académico y privado para compartir buenas prácticas y crear conciencia sobre la seguridad digital en la región.
“La OEA no elige al azar – aclara –. Ellos observan las trayectorias, los aportes que uno hizo a su comunidad y la experiencia acumulada. Estas convocatorias, para nosotros, son como medallas. Es el reconocimiento a muchos años de trabajo, de estudio y de entrega”.
Este año viajará acompañado por otro tucumano, el doctor Juan Carlos María Ghiringhelli. “Después de 10 años, volver a participar y poder hacerlo con otro coterráneo es una emoción enorme”, dice. En Montevideo también se desarrollará Ricet, la Iniciativa Regional para la Educación y Capacitación en Ciberseguridad, coordinada por la Florida International University y la OEA, en colaboración con NICE, que busca fortalecer la educación y la fuerza laboral en ciberseguridad en las Américas.
Su historia empezó en Las Salinas, El Timbó, al suroeste de Tucumán. “Mi papá a los siete años me regaló un robot. Vi el circuito y ahí me flechó la tecnología. En el barrio, los chicos se juntaban en mi casa porque era el primero que tenía una computadora. Y te hablo de los 80, cuando todo llegaba más tarde a Tucumán”, recuerda.
Desde entonces, su curiosidad fue más fuerte que cualquier obstáculo. Rompió radios, armó y desarmó computadoras, aprendió de los errores. “Siempre tuve esa costumbre de observar, probar, equivocarme y volver a intentar. En la adolescencia cuando entré en la escuela de oficiales, ya enseñaba a mis superiores a usar los primeros programas. Y en la universidad encontré mi lugar: la UTN-Facultad Regional Tucumán fue y sigue siendo mi segunda casa”, cuenta el licenciado en Tecnología.
Entre recuerdos menciona al ingeniero Fabián Soria, ex decano UTN-FRT, como uno de los que impulsó su vínculo con la ciberseguridad y con la OEA. “Fabián entendió esa pasión y me permitió desembarcar en procesos tecnológicos que luego me llevaron a representar a la UTN ante la OEA en 2015. Fue el inicio de un camino que cambió mi vida profesional”.
Enseñanzas digitales
“En Argentina seguimos sin hablar de seguridad digital como hablamos de seguridad vial o alimentaria”, advierte Agüero. “Nuestros padres nos decían: ¨tené cuidado al cruzar la calle¨. Pero nadie nos enseña a navegar en Internet. No le decimos a los chicos:¨fijate con quién hablar, cuidá tu contraseña. respetá la edad de las redes¨. Esa cultura no existe, y ahí está el verdadero riesgo”.
Según el Ministerio de Seguridad de la Nación, las denuncias por estafas digitales crecieron más de 320% en los últimos tres años, y solo en 2024 se registraron más de 40.000 casos de fraudes virtuales en el país, principalmente por phishing, robo de identidad y transferencias falsas.
“Los ciberdelincuentes siempre aprovechan el dolor o de la buena fe. En esos momentos aparecen alias falsos o llamadas donde se piden donaciones. La gente termina siendo estafada, y cuando esto sucede la gente no sabe qué hacer, a dónde acudir. Necesitamos un equipo provincial especializado que actúe ante incidentes cibernéticos. Eso nos deja vulnerables”, advierte.
En su repaso, cita los ataques sufridos por organismos nacionales en los últimos años. “El Ministerio de Salud de la Nación, Migraciones y el Renaper fueron vulnerados en distintos momentos. No es ciencia ficción, se trata de nuestra información”. El caso más reciente ocurrió el 12 de octubre de 2025, cuando el grupo de cibercriminales Nova Ransomware aseguró haber ingresado a los servidores del Ministerio de Salud de la Nación y robado bases de datos con información sensible de pacientes y personal médico.
El tema que lo llevará a Uruguay será la Inteligencia Artificial y la ciberseguridad en la región. “Vamos a trabajar sobre tres ejes: la IA, la seguridad digital y el cómputo cuántico, que superará a la IA porque procesa millones de veces más rápido. Si no se controla, puede romper los sistemas de encriptación actuales”, explica.
Después de años de estudio, Agüero aprendió a clasificar las etapas de la IA. “Está la IA Estrecha, que hace una sola cosa mejor que el ser humano —por ejemplo, un asistente virtual—; la IA General, que aprende, compara, razona; y la Super IA, que se entrena a sí misma y toma decisiones sin intervención humana. Ese salto es lo que nos debe preocupar. Desde 2016 vengo investigando cómo evoluciona ese comportamiento, porque ya no se alimenta de personas, sino de otras inteligencias”.
Y agrega, con tono de advertencia:”La tercera guerra mundial no será de armas, será tecnológica. Hoy la disputa no es por territorios, sino por datos, información y control digital. En algunos países, la IA ya actúa de manera autónoma, toma decisiones sin intervención humana. En Argentina todavía estamos en una etapa de observación, pero los riesgos están a la vuelta de la esquina”.
Aguero trabajó 27 años en materia de seguridad en el Gobierno de la provincia, de los cuales 21 los dedicó a la investigación y peritaje de ciberdelitos. En sus últimos cuatro años fue responsable ejecutivo de la División de Delitos Telemáticos, y también se desempeñó en el Ministerio Público Fiscal de Tucumán, dentro del Equipo Científico de Investigaciones Fiscales (ECIF). Su experiencia también lo llevó a colaborar en investigaciones internacionales. Colaboró con el FBI, Interpol, la Guardia Civil Española y la Policía de Investigaciones de Chile, además de trabajar con organismos nacionales como la Cámara Federal de Apelaciones, la Policía Federal Argentina y el Gabinete Nacional de Ministros en materia de ciberdelitos y ciberseguridad.
Desde hace una década participa de los entrenamientos internacionales de la OEA en América Latina y fue distinguido como capacitador oficial para Argentina. Es además fundador y presidente de Red Segura Online, dedicada a pericias, auditorías e investigación digital, y a la capacitación en prevención de ciberdelitos.
“Yo quiero devolver lo que aprendí. En esta sociedad están mis hijos, mis amigos, mi familia. Todos tenemos derecho a un espacio digital seguro”, afirma. Antes de despedirse, deja una reflexión que resume toda su carrera: “La seguridad física uno puede reforzar con una doble llave o con un reja. Pero la seguridad digital requiere un conjunto de técnicas, tecnologías y también herramientas legales como la Ley de Habeas Data, que da forma y fundamento para que el Estado proteja nuestra información. La gente tiene que saber que puede y debe usarla para protegerse. Sin cultura digital, no hay firewall que alcance”.























