EN SITUACIÓN VULNERABLE. Lourdes fue evaluada por médicos.
La historia tribunalicia de la cantante de Bandana, Lourdes Fernández, recién empieza a escribirse. Luego de haber sido encontrada en el departamento de su novio (con quien tuvo varias idas y vueltas, e incluso denuncias de violencia), Leandro García Gómez, quien quedó detenido por privación ilegítima de la libertad, ya se comenzó a discutir la capacidad de la artista para conducir su vida con autonomía, voluntad y libertad a partir de una violenta relación tóxica y su presunta dependencia a drogas. Dar con ella fue posible luego de 12 horas desaparecida y de un allanamiento ordenado por la Justicia, luego de que su pareja afirmara que no estaba en el departamento donde se encontraron botellas de alcohol y pastillas fuera de sus envases, que fueron enviadas al laboratorio químico de Policía Científica para su análisis.
En la continuidad de la causa, según fuentes tribunalicias, se indagará al detenido; se recabarán pruebas sobre anteriores denuncias a la Oficina de Violencia Doméstica; se citará a la artista para que brinde testimonio en forma personal, así se toma contacto directo con su estado, y se convocarán como testigos a sus familiares, representante y colegas.
Ana, hermana de Lourdes, fue contundente ayer, en un contacto con la prensa porteña: “Por suerte está viva, ojalá que recapacite”. La frase encierra la idea de que la vocalista podría decidir volver a establecer la relación con García Gómez, como ya ocurrió en ocasiones anteriores, pese a denuncias sobre agresiones y maltratos. “La estamos acompañando, pero es muy difícil. Ahora está con amigas y mi mamá está muy angustiada. A nosotros, como familia, nos cuesta un montón acercarnos porque en estos casos te alejan y te toman como que vos sos la que está equivocada. A veces es muy difícil salir, aunque vean que por ahí ella lo perdonó o está con él”, agregó. La misma situación de ruptura de la relación está atravesando Lissa Vera, su compañera de Bandana, quien admitió que Lourdes está “bastante enojada conmigo -por haber denunciado su situación-, pero lo importante es que no la hayamos sacado con los pies para adelante”. “A las mujeres les cuesta reconocer que son víctimas y se sienten culpables de haber causado algo. Pero cuando despiertan, el nivel de violencia trepa tanto que se las mata”, añadió.
La situación vuelve a poner en debate la Ley de Salud Mental, cuyas normas limitan fuertemente la incidencia de la familia en la toma de medidas extremas, como la internación compulsiva en caso de ser peligrosa para sí o para terceros. Mabel, la madre de la cantante, interpuso una acción judicial al considerar que “está comprometido el interés público y que el Estado tiene que avanzar aún en contra de la voluntad de Lourdes, que podría estar condicionada por el consumo de sustancias”, explicó a TN su abogado, Yamil Castro Bianchi. “Todo el mundo dice que es grande y que puede hacer lo que quiera con el famoso libre albedrío, pero estamos llenos de condicionamientos que tenemos desde chiquitos. En la vida real a ella le cuesta todo, pero cuando sube al escenario brilla, es increíble lo que hace y es muy responsable siempre con el trabajo”, sostuvo, por su parte, Mabel.
Reencuentro
Todo esto ocurre cuando, en pocas semanas, debía producirse el reencuentro de Bandana -la banda femenina de pop que brilló a principios de siglo- sobre el escenario, lo que ahora está entre signos de pregunta. Una de las versiones que circuló ayer fue que García Gómez estaría disconforme con ese recital porque no fue parte de las negociaciones; por ello, intentaría boicotearlo.
Al encontrar a Lowrdez (tal su apodo artístico luego de la separación de Bandana), fue derivada al hospital Fernández, donde recibió el alta en horas de la madrugada del viernes. Trascendió que los médicos que la trataron la encontraron “muy vulnerable” emocionalmente pero sin alcohol en sangre ni golpes en su cuerpo. Luego fue a casa de una amiga, con quien está hospedada, sin retomar contacto con su familia ni con sus colegas del grupo musical, que salieron a denunciar su estado.





















