PLAGA. Los maíces tardíos y los “guachos” pueden favorecer un aumento.
El 30º informe de la Red Nacional de Monitoreo de Dalbulus maidis, que recopila los resultados de las capturas obtenidas entre el 30 de octubre y el 14 de noviembre de 2025 -con datos aportados y coordinados por la Asociación Maíz y Sorgo Argentino (Maizar) y la participación de Aappce, Aapresid, CREA, INTA y la Eeaoc- mostró la evolución de la plaga en las zonas maiceras del país. El relevamiento confirmó que la ausencia de la “chicharrita del maíz” continúa siendo predominante en todas las regiones agroecológicas, aunque en algunas localidades puntuales dentro de las zonas endémicas se observaron incrementos en las detecciones.
En la zona endémica del NOA, la plaga muestra estabilidad, con ausencia en el 56% de las localidades monitoreadas, mientras que en el 27% las capturas se mantuvieron en el nivel mínimo (uno a cuatro adultos por trampa). El 11% de las trampas se ubicaron en lotes con maíz, principalmente destinados a producción de semillas y choclo. Sólo en tres localidades se registraron aumentos más significativos. El resto se mantuvo sin incidencia.
En el NEA, la otra región endémica, el 69% de las localidades sigue sin detecciones de Dalbulus maidis, mientras que el 21% presentó las capturas más bajas. El 40% de las trampas en esta región se encuentra sobre maíces. Solo dos localidades, Comandante Fontana y Las Lomitas registraron un nivel de capturas significativo.
En la región del Litoral, el 73% de las localidades monitoreadas no registró capturas, a la vez que se detectaron incrementos en la categoría de menor presencia.
El 95% de las trampas en esta región se encuentra en localidades con maíz temprano, prácticamente fuera del período de susceptibilidad, en estados vegetativos avanzados entrando a reproductivos.
En la región Centro-Norte, se acentuó la ausencia del vector, con el 91% de las localidades sin detecciones, y el 9% restante con capturas en la categoría más baja. El 65% de las trampas se encuentra sobre maíces en esta región.
En cuanto al Centro-Sur, el 97% de las localidades no registró detecciones, y el resto estuvo en la categoría mínima. Un 55% de las trampas se encuentra en lotes con maíz en esta región.
Finalmente, el presente informe presentó datos sobre la infectividad de Dalbulus maidis con Corn Stunt Spiroplasma (CSS) en las distintas regiones.
No obstante, el panorama auspicioso, los expertos de la Red insisten en intensificar los monitoreos, tanto de las trampas como de los cultivos, y desde las zonas con maíces tempranos que ya atravesaron las etapas fenológicas iniciales, hasta las áreas de siembras tardías, que pueden tener maíces guachos que favorezcan la supervivencia y multiplicación de la plaga y de sus patógenos.
Según la Red Nacional de Monitoreo, la plaga muestra baja actividad en las áreas endémicas, incluido Tucumán, donde predominan localidades sin detecciones o con capturas leves. Pese a la estabilidad, especialistas recalcan la importancia de continuar con la prevención.




















