El Poder Ejecutivo (PE) invirtió una suma cercana a los $150 millones en la remodelación y jerarquización de los túneles de las calles Córdoba y Mendoza, un trabajo que incluyó la instalación de un sistema de iluminación LED; bombas más potentes y un nuevo generador de energía.
Con estas mejoras, se espera que estos pasos no vuelvan a registrar filtraciones -en especial en las zonas más bajas-, un dolor de cabeza recurrente desde la inauguración de la obra ideada durante el alperovichismo.
Ahora, restan las últimas tareas en la zona, que incluyen la pintura interior -será de color gris, y reemplazará los murales del diseño original- y la demarcación para seguridad vial.
Con la finalización del proyecto, resurgiría la posibilidad de que la Casa de Gobierno plantee ante la Municipalidad de San Miguel de Tucumán la transferencia de los túneles, que fueron construidos para sortear el cinturón ferroviario que recorre la Marco Avellaneda y la Suipacha.
El grueso de las tareas finalizó esta semana. Fueron ejecutadas por administración, con la coordinación del Ministerio de Obras Públicas de la Provincia, y se las solventó con recursos del erario local. Entre los ítems más importantes están las luces que iluminan el interior y el exterior (unos $60 millones), el nuevo generador de energía para casos de cortes de luz (17.000 dólares), las bombas (unos $35 millones)
En más de una década
La construcción de los cruces de las calles Mendoza y Córdoba tuvo su inicio durante la administración de José Alperovich. Tras largos años de gestiones ante la Nación -debido a que los predios de los ferrocarriles son de jurisdicción federal-, la obra tuvo sus primeros movimientos a finales de 2013. En julio de 2015 se habilitó el paso subterráneo de calle Córdoba. Dos años después, ya durante el primer mandato de Juan Manzur, se cortó la cinta en el acceso de calle Mendoza.
Durante la última década hubo polémicas por las filtraciones, un problema agravado por los frecuentes actos vandálicos que afectaban el sistema de bombeo.
EN LOS ALREDEDORES. Esta semana se habilitó el nuevo sistema de luces.
El ministro de Obras Públicas, Marcelo Nazur, destacó la decisión del gobernador Osvaldo Jaldo de mejorar este ingreso estratégico a la zona del microcentro.
“El objetivo de esta intervención fue recuperar un punto clave de circulación para la Capital y garantizar condiciones de seguridad acordes a lo que la ciudad necesita. Hoy podemos decir que los túneles, las pasarelas y todo el entorno fueron completamente revalorizados y vuelven a funcionar como corresponde, brindando más seguridad vial y jerarquizando este pulmón de la ciudad”, señaló el funcionario.
Además del recambio de luminarias por tecnología LED en los pasos bajo nivel y en los accesos, se instaló un nuevo sistema de iluminación en las pasarelas peatonales. A la vez, se renovó la instalación eléctrica, con la adecuación de tableros y la recuperación de cañerías afectadas por vandalismo. También se mejoró el sistema de emergencia y ventilación asociado a los grupos electrógenos del proyecto original. Y se concretó el recambio integral del equipo de bombas, a fin de evitar anegamientos y garantizar el correcto funcionamiento del drenaje durante el período estival, según el detalle oficial.
EN EL INTERIOR. Una de las metas es evitar las filtraciones en los túneles.
Más seguridad
Para prevenir actos de vandalismo
Además de las filtraciones, uno de los principales problemas que reportaron los túneles de las calles Mendoza y Córdoba fueron los actos vandálicos. Los daños a los tableros y a otras instalaciones, como cañerías, derivaron en un sinfín de oportunidades en fallas en el sistema de bombas, con lo que el agua terminó ingresando a los cruces. Uno de los objetivos en el Poder Ejecutivo es reforzar la seguridad en la zona, no sólo con la nueva iluminación. Existe la idea de instalar cámaras de vigilancia, aunque por lo pronto se reforzó la vigilancia en la zona de los accesos a los túneles.

























