26 Marzo 2011
Aiziczon nunca habría salido de Yerba Buena
Según la Policía, luego de partir de la casa de su madre, se dirigió adonde lo esperaba una mujer, siempre dentro del mismo municipio. La Policía dice tener los datos para identificar a las personas que estarían vinculadas con el homicidio. Según determinaron, la víctima fue a encontrarse con una mujer a pocas cuadras de la casa en la que había almorzado. Gran parte de lo que se sabe se descubrió mediante pericias informáticas en las redes sociales.
Todo indica que a Pablo Aiziczon lo mataron en Yerba Buena. Esa es la hipótesis que manejan los investigadores. "El auto no debió haber recorrido una distancia muy grande", aseguran. ¿Por qué?
En las calles de la ciudad donde creció el profesor de tenis hay unas 18 cámaras de seguridad; la mayoría está dirigida hacia las avenidas Presidente Perón y Aconquija. Y una de las primeras medidas que tomó la Policía el martes, cuando se supo que Aiziczon había desaparecido, fue dirigirse al Centro de Monitoreo.
Agentes de esa dependencia y de la División Homicidios y Delitos Complejos revisaron prácticamente todas las filmaciones. "Se supo de él por última vez el lunes alrededor de las 14. Entonces, se buscó desde dos horas antes; así se trabajó con cada dato. Pero no hubo nada", indicaron fuentes que participaron de la medida. De todas formas, están repasando las grabaciones con la esperanza de obtener alguna pista.
Los "visualizadores" (como llaman a los policías que observan los monitores) también trataron de determinar en qué horario dejaron el Suzuki Swift gris oscuro con el cuerpo de Aiziczon estacionado sobre un pasaje de barrio Horco Molle. "Hay una cámara a unos 350 metros de allí, sobre avenida Perón. Pero no captó nada", comentaron desde la fuerza. Los árboles y la distancia, añadió la fuente, impiden tener una visión nítida de esa esquina.
Según los policías, el profesor debía entrar al club a las 15.10 (había quedado así con un alumno), por lo que desde que salió de su casa y hasta que debía ir a trabajar, no iba a pasar más de media hora. Por eso se cree que no salió de Yerba Buena.
Además, el auto fue hallado casi a mitad de cuadra, sobre un pasaje sin nombre perpendicular a la avenida, cercano a calle Saavedra Lamas. Eso alimenta la hipótesis de que Aiziczon, que había salido desde la casa de su madre, situada en calle Lobo de la Vega al 200, nunca manejó por la Perón ni por la Aconquija. "Hay algunas cámaras instaladas en la zona interna de la ciudad", aclararon desde la Policía. Pero esos equipos tampoco permitieron ver nada importante.
Personal de la Brigada Norte también estuvo recorriendo todas las estaciones de servicio de Yerba Buena y las que están sobre la avenida Mate de Luna. "Como en el lugar del hecho se encontró un bidón con nafta que no era de la víctima, se creyó que se podía obtener una pista con las cámaras de seguridad", indicó una fuente. Se estudiaron todas las filmaciones, pero tampoco se obtuvo resultado alguno. Por todo esto, los investigadores pusieron la lupa sobre Yerba Buena. Particularmente, sobre el barrio Telefónicos. Incluso, se están haciendo tareas de inteligencia en esas zonas para corroborar si se detecta algún movimiento llamativo. Eso sí: el acento está puesto entre la Perón y la Aconquija.
Poco más de una docena de cuadras separan ese vecindario del lugar del crimen. Y, aunque nadie vio quién abandonaba el Suzuki de Aiziczon con el cuerpo dentro -mucho menos cuándo-, existe la firme sospecha de que allí o en los alrededores se cometió el crimen. ¿Hubo algún dato o es mera intuición? El tiempo lo dirá.
En las calles de la ciudad donde creció el profesor de tenis hay unas 18 cámaras de seguridad; la mayoría está dirigida hacia las avenidas Presidente Perón y Aconquija. Y una de las primeras medidas que tomó la Policía el martes, cuando se supo que Aiziczon había desaparecido, fue dirigirse al Centro de Monitoreo.
Agentes de esa dependencia y de la División Homicidios y Delitos Complejos revisaron prácticamente todas las filmaciones. "Se supo de él por última vez el lunes alrededor de las 14. Entonces, se buscó desde dos horas antes; así se trabajó con cada dato. Pero no hubo nada", indicaron fuentes que participaron de la medida. De todas formas, están repasando las grabaciones con la esperanza de obtener alguna pista.
Los "visualizadores" (como llaman a los policías que observan los monitores) también trataron de determinar en qué horario dejaron el Suzuki Swift gris oscuro con el cuerpo de Aiziczon estacionado sobre un pasaje de barrio Horco Molle. "Hay una cámara a unos 350 metros de allí, sobre avenida Perón. Pero no captó nada", comentaron desde la fuerza. Los árboles y la distancia, añadió la fuente, impiden tener una visión nítida de esa esquina.
Según los policías, el profesor debía entrar al club a las 15.10 (había quedado así con un alumno), por lo que desde que salió de su casa y hasta que debía ir a trabajar, no iba a pasar más de media hora. Por eso se cree que no salió de Yerba Buena.
Además, el auto fue hallado casi a mitad de cuadra, sobre un pasaje sin nombre perpendicular a la avenida, cercano a calle Saavedra Lamas. Eso alimenta la hipótesis de que Aiziczon, que había salido desde la casa de su madre, situada en calle Lobo de la Vega al 200, nunca manejó por la Perón ni por la Aconquija. "Hay algunas cámaras instaladas en la zona interna de la ciudad", aclararon desde la Policía. Pero esos equipos tampoco permitieron ver nada importante.
Personal de la Brigada Norte también estuvo recorriendo todas las estaciones de servicio de Yerba Buena y las que están sobre la avenida Mate de Luna. "Como en el lugar del hecho se encontró un bidón con nafta que no era de la víctima, se creyó que se podía obtener una pista con las cámaras de seguridad", indicó una fuente. Se estudiaron todas las filmaciones, pero tampoco se obtuvo resultado alguno. Por todo esto, los investigadores pusieron la lupa sobre Yerba Buena. Particularmente, sobre el barrio Telefónicos. Incluso, se están haciendo tareas de inteligencia en esas zonas para corroborar si se detecta algún movimiento llamativo. Eso sí: el acento está puesto entre la Perón y la Aconquija.
Poco más de una docena de cuadras separan ese vecindario del lugar del crimen. Y, aunque nadie vio quién abandonaba el Suzuki de Aiziczon con el cuerpo dentro -mucho menos cuándo-, existe la firme sospecha de que allí o en los alrededores se cometió el crimen. ¿Hubo algún dato o es mera intuición? El tiempo lo dirá.
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