La izquierda uruguaya renegó del pedido de Tabaré a Bush

El ex presidente oriental se disculpó por hablar del posible conflicto bélico por la pastera. Según un alto funcionario hubiera sido preferible que se calle. Lacalle salió a defender a Vázquez y a defenestrar a la Argentina

MERCOSUR, EN 2006. Tabaré y Kirchner, cuando había buena relación. TELAM / ARCHIVO MERCOSUR, EN 2006. Tabaré y Kirchner, cuando había buena relación. TELAM / ARCHIVO
14 Octubre 2011
BUENOS AIRES.- El ex mandatario uruguayo Tabaré Vázquez pidió ayer disculpas y anunció su retiro de la actividad política pública, tras el revuelo generado por haber revelado que analizó la posibilidad de un conflicto armado con la Argentina durante su presidencia a raíz del caso Botnia.

Vázquez aseguró que realizó un "relato de lo realmente acontecido" durante el conflicto bilateral, pero admitió que dichas declaraciones fueron inoportunas y reconoció que "pueden dañar las excelentes relaciones" que hoy tienen ambos países.

"Por todo ello, presento mis excusas y anuncio mi retiro de la actividad política pública", concluyó el ex presidente uruguayo mediante un comunicado.

Vázquez realizó este anuncio luego del escándalo que desató con sus declaraciones, al revelar que evaluó la posibilidad de un enfrentamiento bélico con la Argentina y hasta pidió ayuda a EEUU, durante el conflicto por la instalación de la papelera.

Al respecto, la senadora del Frente Amplio y primera dama, Lucía Topolansky, consideró que que las declaraciones de Tabaré "son valientes", pero admitió: "a los que somos de izquierda nos golpeó mucho el tema de (el pedido de ayuda a George) Bush".

El gobierno de José Mujica había salido más temprano a despegarse de los dichos de Vázquez, al señalar que la polémica no afectará la "cordialísima e intensa relación" con la Argentina. El secretario de la Presidencia uruguayo, Alberto Breccia, admitió que "hubiera preferido" que Vázquez "no hiciera" esas revelaciones, que también generaron fuertes réplicas de ex funcionarios argentinos, aunque el Gobierno guardó silencio. De hecho, el canciller Héctor Timerman y su par uruguayo, Luis Almagro, acordaron no aumentar la polémica por los dichos de Vázquez.

En tanto, el ex presidente uruguayo, Luis Lacalle, respaldó las medidas de Vázquez durante el conflicto por Botnia y cargó duro contra la Argentina. "Uruguay nació a pesar de los vecinos, como un acto de deseo de ser algo distinto. No le fue fácil ni los grandes países que se formaron a nuestro lado lo aceptaron de buen grado durante el siglo XIX. Luego no nos han hecho la vida muy fácil, en especial la Argentina", señaló.

Luego, reiteró históricos reclamos uruguayos al señalar: "dentro del Mercosur las cosas ni mejoraron y los laudos contrarios no son respetados por los vecinos". "En cada oportunidad apropiada estorban nuestros intereses, llámese construcción de puertos, dragados o emprendimientos fabriles", destacó. (NA-Especial)

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