04 Mayo 2012
EMBLEMATICO. El Globe Tabern es un popular pub de la capital malvinense. CAPTURA DE VIDEO
BUENOS AIRES.- Cuatro atletas argentinos y dos camarógrafos estadounidenses participaron de la "misión secreta" en la que se filmó, en las Islas Malvinas, el spot que levantó polvareda. Los productores aprovecharon la octava edición de la Standard Chartered Stanley Marathon (la carrera de 42 kilómetros que se realiza en Malvinas).
El 18 de marzo, Fernando Zylberberg (el único que tiene asegurado el viaje a los Olímpicos), la velocista porteña Florencia Lamboglia, el fondista santiagueño Franco Díaz y el deportista amateur Laureano Andreotti empezaron a calentar el ambiente para Londres 2012.
De la competencia participaron otros 12 argentinos en clase individual y dos equipos de postas. Uno de ellos fue "Dimos Todo", conformado por ex combatientes, que obtuvo el primer puesto. El otro equipo eran "Los Galgos", Zylberberg, Lamboglia, Díaz y Andreotti, quienes arribaron a la meta dos horas tarde, en la posición 13°, afectados por el viento en contra. Su objetivo, sin embargo, era otro.
El experimentado jugador de hockey, los dos jóvenes corredores de 400 y 800 metros, y el deportista amateur, que decía trabajar en una empresa de informática y oficiaba de traductor habían viajado a las islas para filmar la publicidad que se difundió bajo el lema "para competir en suelo inglés, entrenamos en suelo argentino"; con vistas a los Juegos Olímpicos Londres 2012, pero también con la mirada puesta en el 30 aniversario del hundimiento del Crucero General Belgrano.
Durante cinco días, "Los Galgos" recorrieron distintas locaciones de la isla para filmar el spot. Pese a que en las tomas participaban los cuatro, se decidió editar sólo a Zylberberg, el único que tiene asegurada su participación en los Juegos Olímpicos de Londres.
Dos camarógrafos norteamericanos, uno residente en Nueva York, otro en Miami, los acompañaban todo el tiempo, supuestamente para filmar un documental sobre la pasión por correr maratones. En un momento, cuando la sospecha sobre se acrecentó, los norteamericanos decidieron fingir una entrevista con un deportista argentino en el Malvina House, donde se hospedaban, contó Clarin.com.
Todos los días, el equipo tenía que zafar de los otros corredores que querían acompañarlos en sus paseos por el Giypsy Cove -donde se avistan pinguinos-, los montes Longdon o Moody Brook -donde se desarrollaron los combates finales en 1982- o el cementerio argentino de Darwin, cuyas imágenes no fueron editadas en el spot.
La propuesta había surgido de la agencia de publicidad Young & Rubicam (Y & R) Buenos Aires. "Lo primero que hicimos fue mostrárselo, personalmente, a los ex combatientes. Vi sus caras de emoción", le dijo al diario "La Nación" el director general creativo de Y&R, principal impulsor de esta idea.
La agencia Y&R (perteneciente al poderoso holding británico WPP) tiene entre sus clientes a Quilmes y TyC Sports, dos empresas que apuntan fuertemente al "ser argentino" en sus campañas, por lo que se pensó en un primer momento que la pubicidad había sido hecha para alguno de ellos. Sin embargo, a poco de andar se conoció que el equipo publicitario, luego de "probar" el spot con ex combatientes, entregó las imágenes Alfredo Scocimarro. Dos semanas después, el vocero confirmó a la agencia que querían ponerle el sello del Gobierno. (Lanacion.com-Clarin.com)
El 18 de marzo, Fernando Zylberberg (el único que tiene asegurado el viaje a los Olímpicos), la velocista porteña Florencia Lamboglia, el fondista santiagueño Franco Díaz y el deportista amateur Laureano Andreotti empezaron a calentar el ambiente para Londres 2012.
De la competencia participaron otros 12 argentinos en clase individual y dos equipos de postas. Uno de ellos fue "Dimos Todo", conformado por ex combatientes, que obtuvo el primer puesto. El otro equipo eran "Los Galgos", Zylberberg, Lamboglia, Díaz y Andreotti, quienes arribaron a la meta dos horas tarde, en la posición 13°, afectados por el viento en contra. Su objetivo, sin embargo, era otro.
El experimentado jugador de hockey, los dos jóvenes corredores de 400 y 800 metros, y el deportista amateur, que decía trabajar en una empresa de informática y oficiaba de traductor habían viajado a las islas para filmar la publicidad que se difundió bajo el lema "para competir en suelo inglés, entrenamos en suelo argentino"; con vistas a los Juegos Olímpicos Londres 2012, pero también con la mirada puesta en el 30 aniversario del hundimiento del Crucero General Belgrano.
Durante cinco días, "Los Galgos" recorrieron distintas locaciones de la isla para filmar el spot. Pese a que en las tomas participaban los cuatro, se decidió editar sólo a Zylberberg, el único que tiene asegurada su participación en los Juegos Olímpicos de Londres.
Dos camarógrafos norteamericanos, uno residente en Nueva York, otro en Miami, los acompañaban todo el tiempo, supuestamente para filmar un documental sobre la pasión por correr maratones. En un momento, cuando la sospecha sobre se acrecentó, los norteamericanos decidieron fingir una entrevista con un deportista argentino en el Malvina House, donde se hospedaban, contó Clarin.com.
Todos los días, el equipo tenía que zafar de los otros corredores que querían acompañarlos en sus paseos por el Giypsy Cove -donde se avistan pinguinos-, los montes Longdon o Moody Brook -donde se desarrollaron los combates finales en 1982- o el cementerio argentino de Darwin, cuyas imágenes no fueron editadas en el spot.
La propuesta había surgido de la agencia de publicidad Young & Rubicam (Y & R) Buenos Aires. "Lo primero que hicimos fue mostrárselo, personalmente, a los ex combatientes. Vi sus caras de emoción", le dijo al diario "La Nación" el director general creativo de Y&R, principal impulsor de esta idea.
La agencia Y&R (perteneciente al poderoso holding británico WPP) tiene entre sus clientes a Quilmes y TyC Sports, dos empresas que apuntan fuertemente al "ser argentino" en sus campañas, por lo que se pensó en un primer momento que la pubicidad había sido hecha para alguno de ellos. Sin embargo, a poco de andar se conoció que el equipo publicitario, luego de "probar" el spot con ex combatientes, entregó las imágenes Alfredo Scocimarro. Dos semanas después, el vocero confirmó a la agencia que querían ponerle el sello del Gobierno. (Lanacion.com-Clarin.com)
NOTICIAS RELACIONADAS