29 Marzo 2013
LA IMAGEN QUE RECORRIÓ EL MUNDO. Francisco orando, conmovió a los cristianos. REUTERS.
ROMA, Italia.- El Papa Francisco oró postrado frente a la Cruz, como una señal de lo pequeño que somos ante los ojos del Creador. Lo hizo durante los actos por la conmemoración del Viernes Santo.
En la ceremonia, Francisco, se sentó bajo un toldo rojo mientras que los fieles provenientes de diversas partes del mundo se alternaban llevando una cruz de madera en el día que los católicos conmemoran la muerte de Jesús. "En ocasiones puede parecer que Dios no reacciona al mal, como que estuviera en silencio", dijo el Papa, hablando lentamente en italiano.
"Y sin embargo, Dios ha hablado, ha respondido, y su respuesta está en la Cruz de Cristo: una palabra que es amor, compasión, perdón", continuó. "Los cristianos deben responder al mal con el bien", agregó.
Las meditaciones para las 14 "estaciones de la cruz", que conmemoran los eventos de las últimas horas de la vida de Jesús - desde que Poncio Pilato lo condenó hasta su entierro en una tumba en la roca - fueron escritas por gente joven del Líbano. Francisco elogió a los cristianos libaneses y musulmanes que trataron de vivir juntos y que, dijo, al hacerlo, daban una señal de esperanza al mundo. (Reuters)
En la ceremonia, Francisco, se sentó bajo un toldo rojo mientras que los fieles provenientes de diversas partes del mundo se alternaban llevando una cruz de madera en el día que los católicos conmemoran la muerte de Jesús. "En ocasiones puede parecer que Dios no reacciona al mal, como que estuviera en silencio", dijo el Papa, hablando lentamente en italiano.
"Y sin embargo, Dios ha hablado, ha respondido, y su respuesta está en la Cruz de Cristo: una palabra que es amor, compasión, perdón", continuó. "Los cristianos deben responder al mal con el bien", agregó.
Las meditaciones para las 14 "estaciones de la cruz", que conmemoran los eventos de las últimas horas de la vida de Jesús - desde que Poncio Pilato lo condenó hasta su entierro en una tumba en la roca - fueron escritas por gente joven del Líbano. Francisco elogió a los cristianos libaneses y musulmanes que trataron de vivir juntos y que, dijo, al hacerlo, daban una señal de esperanza al mundo. (Reuters)
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