28 Abril 2013
CLICK PRECISO. El Fiat 128 de Fernando Caro se encuentra en pleno vuelco, mientras el público sigue atónito la escena.
A pocos metros del inicio del especial Mercedes-Ruta 321 en la hoja de ruta estaba marcada una chicana. Ese punto fue el elegido por mucha gente. Era inmejorable para apreciar de qué modo se realiza una maniobra técnica.
El sector implicaba que las máquinas rebajen la velocidad, casi a cero. El tacto para frenar era clave para sortear con éxito la curva. Una vez sorteada la situación, otra curva esperaba a los autos, que arrancaron los aplausos de dos maneras: cada vez que hacían derrapar las ruedas traseras y cuando sus ocupantes saludaban.
Pero no faltó el que pensó en el accidente. "Seguro alguien se pega", se escuchó. O sea, alguien choca. Y chocó nomás. Fue Fernando Caro el que protagonizó la situación. "Veníamos en cuarta a fondo. Es una curva para frenar a cero. Me pasé en el frenaje y le pegué al bordo, choqué contra un tarro que se metió debajo del auto y fue lo que me hizo volcar", explicó el piloto del Fiat 128.
Inmediatamente, se vivió una de las clásicas postales de un rally. El público se acercó raudamente para ayudar y lo hizo respetando las indicaciones de la policía y los vigías de la organización. Casi tan rápido como un pit stop de la F-1, en segundos el auto que había quedado con el techo en el suelo estuvo sobre sus cuatro ruedas gracias al auxilio de los hombres. Las damas se sumaron con los aplausos. "La gente estaba bien ubicada", detalló el taficeño. "Sentí mucho su cariño. Es el folklore del rally; lo que le gusta a todos", reconoció. El episodio le salió "Caro", pero fue de lo mejor.
• En Catamarca, hay rally en El Bañado de Ovanta y hay dos representantes tucumanos: Adrián Assaf, 5° en la general con VW Polo A-7 y Ricardo Collado (p), 10° con un VW Gol A-6. Gana el local Carlos Prevedello (Subaru).
El sector implicaba que las máquinas rebajen la velocidad, casi a cero. El tacto para frenar era clave para sortear con éxito la curva. Una vez sorteada la situación, otra curva esperaba a los autos, que arrancaron los aplausos de dos maneras: cada vez que hacían derrapar las ruedas traseras y cuando sus ocupantes saludaban.
Pero no faltó el que pensó en el accidente. "Seguro alguien se pega", se escuchó. O sea, alguien choca. Y chocó nomás. Fue Fernando Caro el que protagonizó la situación. "Veníamos en cuarta a fondo. Es una curva para frenar a cero. Me pasé en el frenaje y le pegué al bordo, choqué contra un tarro que se metió debajo del auto y fue lo que me hizo volcar", explicó el piloto del Fiat 128.
Inmediatamente, se vivió una de las clásicas postales de un rally. El público se acercó raudamente para ayudar y lo hizo respetando las indicaciones de la policía y los vigías de la organización. Casi tan rápido como un pit stop de la F-1, en segundos el auto que había quedado con el techo en el suelo estuvo sobre sus cuatro ruedas gracias al auxilio de los hombres. Las damas se sumaron con los aplausos. "La gente estaba bien ubicada", detalló el taficeño. "Sentí mucho su cariño. Es el folklore del rally; lo que le gusta a todos", reconoció. El episodio le salió "Caro", pero fue de lo mejor.
• En Catamarca, hay rally en El Bañado de Ovanta y hay dos representantes tucumanos: Adrián Assaf, 5° en la general con VW Polo A-7 y Ricardo Collado (p), 10° con un VW Gol A-6. Gana el local Carlos Prevedello (Subaru).
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