30 Mayo 2013
DECISIÓN. Durao Barroso anuncia la implementación de las reformas. REUTERS
BRUSELAS.- Los países de la zona euro deben concentrarse en reformar sus mercados laborales y de servicios y podrían desacelerar el ritmo de reducción de deuda, planteó la Comisión Europea, marcando un giro en sus políticas antes basadas meramente en la austeridad.
El cambio de énfasis tiene lugar mientras la zona euro lucha por escapar de un segundo año consecutivo de recesión y un nivel de desempleo en un máximo histórico debido al colapso de la confianza de los inversores durante tres años de crisis de deuda.
"Estados miembros deberían intensificar ahora sus esfuerzos sobre reformas estructurales para competitividad", declaró el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso. "La consolidación fiscal está en curso y debería continuar con un ritmo que refleje la situación en cada país", agregó.
La comisión dio a Francia y España -la segunda y cuarta mayor de la zona euro, respectivamente- otros dos años para reducir sus déficits presupuestarios a menos que el techo de la UE de un 3 % del PBI mientras luchan con la recesión.
El desempleo en Francia supera un 10 % y se estima que aumentará. La desocupación en España llega a un 27 % y más de la mitad de los jóvenes no tienen empleo. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) advirtió que el bloque monetario se contraerá un 0,6 % este año.
Polonia y Eslovenia también fueron beneficiados con dos años más, mientras que Portugal y Holanda recibieron cada uno una extensión de un año para el plazo de reducción de déficit, impuesto como parte de un marco disciplinario acordado por estados miembros para apuntalar al euro. En un tributo a los difíciles esfuerzos de consolidación adoptados hasta ahora, la comisión puso fin a las medidas disciplinarias contra Italia, Hungría, Letonia, Lituania y Rumania porque han reducido sus déficits.
Debido a que los endeudados gobiernos no pueden costear una reactivación del crecimiento a través del gasto público, deben abordar las ineficiencias en los mercados laborales, en los sistemas de pensión y en los servicios públicos.
La Comisión Europea enfatizó la necesidad de que los mercados laborales sean más flexibles y sobre la apertura de los mercados para productos y servicios. También llamó a Alemania a elevar los salarios en línea con la productividad, de modo que la demanda interna aumente. Pero buena parte de su atención se concentró en Francia, que afirmó que debe realizar reformas laborales y de pensiones para recuperar el dinamismo de los negocios perdido del país, al tiempo que corta el gasto público. El salario mínimo de 1.430 euros mensuales es uno de los más altos de Europa. (Reuters)
El cambio de énfasis tiene lugar mientras la zona euro lucha por escapar de un segundo año consecutivo de recesión y un nivel de desempleo en un máximo histórico debido al colapso de la confianza de los inversores durante tres años de crisis de deuda.
"Estados miembros deberían intensificar ahora sus esfuerzos sobre reformas estructurales para competitividad", declaró el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso. "La consolidación fiscal está en curso y debería continuar con un ritmo que refleje la situación en cada país", agregó.
La comisión dio a Francia y España -la segunda y cuarta mayor de la zona euro, respectivamente- otros dos años para reducir sus déficits presupuestarios a menos que el techo de la UE de un 3 % del PBI mientras luchan con la recesión.
El desempleo en Francia supera un 10 % y se estima que aumentará. La desocupación en España llega a un 27 % y más de la mitad de los jóvenes no tienen empleo. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) advirtió que el bloque monetario se contraerá un 0,6 % este año.
Polonia y Eslovenia también fueron beneficiados con dos años más, mientras que Portugal y Holanda recibieron cada uno una extensión de un año para el plazo de reducción de déficit, impuesto como parte de un marco disciplinario acordado por estados miembros para apuntalar al euro. En un tributo a los difíciles esfuerzos de consolidación adoptados hasta ahora, la comisión puso fin a las medidas disciplinarias contra Italia, Hungría, Letonia, Lituania y Rumania porque han reducido sus déficits.
Debido a que los endeudados gobiernos no pueden costear una reactivación del crecimiento a través del gasto público, deben abordar las ineficiencias en los mercados laborales, en los sistemas de pensión y en los servicios públicos.
La Comisión Europea enfatizó la necesidad de que los mercados laborales sean más flexibles y sobre la apertura de los mercados para productos y servicios. También llamó a Alemania a elevar los salarios en línea con la productividad, de modo que la demanda interna aumente. Pero buena parte de su atención se concentró en Francia, que afirmó que debe realizar reformas laborales y de pensiones para recuperar el dinamismo de los negocios perdido del país, al tiempo que corta el gasto público. El salario mínimo de 1.430 euros mensuales es uno de los más altos de Europa. (Reuters)