13 Junio 2013
LA TIENE ATADA. "Beto" quiere dejar de ser una promesa.
Por mamá Elvira, Alberto está hoy acá, parado frente al cronista de LG Deportiva con un terror sólo visto en plena noche de miedo, con el exorcista de telonero de una noche trágica. Lo de Argañaraz es temor escénico. No está acostumbrado a pararse frente a un micrófono y menos a describir qué siente, cómo vive y qué hace de su vida para ser el elegido para la nota, cuando días atrás era uno más de los tantos chicos que alguna vez soñaron con debutar en Primera y gritar un gol.
"Beto", el mismo "Beto" tachado por triplicado en las pruebas de juveniles de Atlético, resume su estado en tres palabras idénticas. "Feliz, feliz, feliz". Así está el goleador de la cantera "decana", firmante de 17 conquistas en la temporada pasada en la Liga (sin jugar el torneo entero) y con otras tres en igual cantidad de partidos este año 2013/14. Argañaraz es la ferocidad vestida de carne y hueso. Sus credenciales eran conocidas abajo, no así en la B Nacional.
Increíble pero real, en su corrida previa a su iniciación asesina en las redes contrarias de la B, el amigo ni se enteró de la deliciosa rabona del asistidor Agustín Peña. "Mi viejo me contó, yo corrí y me encontré con la pelota y definí a un palo porque tenía al arquero que se me venía encima", recuerda parte de la sentencia Alberto. "No sabía si era gol o no. Yo corrí como loco. No sabía dónde meterme". Su olfato le había anticipado que su puntazo iba a terminar incubándose en los tres palos del arquero de Brown.
"Gracias a Dios se me dio, es un sueño cumplido", reconoce el pibe de 20 años. Y todavía no cae. "No, no caigo, en serio te lo digo. No caigo, no caigo, no caigo. Todo esto es muy fuerte. Todos los días veo el gol, es algo emocionante para mí. Lloré lo que nunca en mi vida", abre su corazón al hincha el posible heredero de Luis Rodríguez. "Beto" llegó para quedarse en la elite. "Yo soy jugador del club, si no estoy aquí, voy a seguir en la Liga. Dios quiera pueda seguir". La fe mueve montañas. Y sus goles podrán mover planetas, si llegan en el torneo mayor.
"No tengo contrato, recibo viáticos como todos los chicos... Te digo la verdad, todavía no pienso en la plata. La plata llega sola, me dice mi vieja. Trato de hacer las cosas bien para tener una oportunidad", reconoce este agradecido de Ricardo Rodríguez. "Es uno de los técnicos que más chicos llevó al banco, que más chicos tiene entrenando con el plantel superior. Eso es algo que no todos los DT hacen. Le estaré eternamente agradecido por todo lo que hace por mí y por darme minutos dentro de una cancha, que es lo importante".
Después de la tarde más notable de su carrera, "Beto" hizo la de siempre. Caminó a la parada junto a papá (Jorge) y esperó el colectivo con destino al barrio San Francisco. "Soy igual que siempre. No tengo por qué cambiar. Mi amigos me cargaron un poco, ja. Aparte, en casa estamos divididos. Dos somos de Atlético y dos de San Martín. Igual, Facundo y Bruno, los del medio, también me felicitaron. Adrián, el más grande y yo somos de Atlético a morir".
Cuna de sangre laburante, Argañaraz eligió la suya: el fútbol. Supo reponerse de las tachadas, de los "no" desoladores. "El sacrificio y la humildad hacen que nunca deje de pelearla. Me esforcé al máximo para estar donde estoy y tengo que seguir así. Si no estoy en condiciones o con fuerza para jugar, nunca voy a llegar a nada", firma "Beto" Argañaraz, con la frente en alto y los botines cargados de gol.
Complicado
"RR" no la tendrá fácil para armar el equipo que visite el próximo lunes a Douglas Haig, en Pergamino. Además de suspendidos, el DT tiene varios lesionados en el plantel. Los juveniles podrían ser su única solución.
Entregan padrones
La Junta Electoral incorporó 18 socios y no dio de baja a ninguno, al cerrarse anoche el plazo del proceso electoral. "Hoy entregaremos los padrones. El espíritu es que participe la mayor cantidad de lista posible", señaló su presidente, Francisco Mejías.
"Beto", el mismo "Beto" tachado por triplicado en las pruebas de juveniles de Atlético, resume su estado en tres palabras idénticas. "Feliz, feliz, feliz". Así está el goleador de la cantera "decana", firmante de 17 conquistas en la temporada pasada en la Liga (sin jugar el torneo entero) y con otras tres en igual cantidad de partidos este año 2013/14. Argañaraz es la ferocidad vestida de carne y hueso. Sus credenciales eran conocidas abajo, no así en la B Nacional.
Increíble pero real, en su corrida previa a su iniciación asesina en las redes contrarias de la B, el amigo ni se enteró de la deliciosa rabona del asistidor Agustín Peña. "Mi viejo me contó, yo corrí y me encontré con la pelota y definí a un palo porque tenía al arquero que se me venía encima", recuerda parte de la sentencia Alberto. "No sabía si era gol o no. Yo corrí como loco. No sabía dónde meterme". Su olfato le había anticipado que su puntazo iba a terminar incubándose en los tres palos del arquero de Brown.
"Gracias a Dios se me dio, es un sueño cumplido", reconoce el pibe de 20 años. Y todavía no cae. "No, no caigo, en serio te lo digo. No caigo, no caigo, no caigo. Todo esto es muy fuerte. Todos los días veo el gol, es algo emocionante para mí. Lloré lo que nunca en mi vida", abre su corazón al hincha el posible heredero de Luis Rodríguez. "Beto" llegó para quedarse en la elite. "Yo soy jugador del club, si no estoy aquí, voy a seguir en la Liga. Dios quiera pueda seguir". La fe mueve montañas. Y sus goles podrán mover planetas, si llegan en el torneo mayor.
"No tengo contrato, recibo viáticos como todos los chicos... Te digo la verdad, todavía no pienso en la plata. La plata llega sola, me dice mi vieja. Trato de hacer las cosas bien para tener una oportunidad", reconoce este agradecido de Ricardo Rodríguez. "Es uno de los técnicos que más chicos llevó al banco, que más chicos tiene entrenando con el plantel superior. Eso es algo que no todos los DT hacen. Le estaré eternamente agradecido por todo lo que hace por mí y por darme minutos dentro de una cancha, que es lo importante".
Después de la tarde más notable de su carrera, "Beto" hizo la de siempre. Caminó a la parada junto a papá (Jorge) y esperó el colectivo con destino al barrio San Francisco. "Soy igual que siempre. No tengo por qué cambiar. Mi amigos me cargaron un poco, ja. Aparte, en casa estamos divididos. Dos somos de Atlético y dos de San Martín. Igual, Facundo y Bruno, los del medio, también me felicitaron. Adrián, el más grande y yo somos de Atlético a morir".
Cuna de sangre laburante, Argañaraz eligió la suya: el fútbol. Supo reponerse de las tachadas, de los "no" desoladores. "El sacrificio y la humildad hacen que nunca deje de pelearla. Me esforcé al máximo para estar donde estoy y tengo que seguir así. Si no estoy en condiciones o con fuerza para jugar, nunca voy a llegar a nada", firma "Beto" Argañaraz, con la frente en alto y los botines cargados de gol.
Complicado
"RR" no la tendrá fácil para armar el equipo que visite el próximo lunes a Douglas Haig, en Pergamino. Además de suspendidos, el DT tiene varios lesionados en el plantel. Los juveniles podrían ser su única solución.
Entregan padrones
La Junta Electoral incorporó 18 socios y no dio de baja a ninguno, al cerrarse anoche el plazo del proceso electoral. "Hoy entregaremos los padrones. El espíritu es que participe la mayor cantidad de lista posible", señaló su presidente, Francisco Mejías.