24 Junio 2013
Dos de cada tres paulistas apoyan la protesta
Organismos de recaudación informan que el gasto en el Mundial será de U$S 519 millones, contradiciendo el discurso de la Presidenta El integrante del Comité Organizador del Mundial está molesto por las críticas de su colega sobre los "elevados gastos" del certamen. Según un sondeo, la mayoría pide que sigan las manifestaciones. Dilma había negado gastos en estadios con dinero público.
RONALDO. Le pidió a su colega que busque mejoras para la gente.
SAN PABLO.- Dos de cada tres brasileños residentes en San Pablo, es decir, el 66% de los ciudadanos de la mayor metrópolis sudamericana, cree que las protestas que sacuden Brasil desde el 13 de junio deben continuar, reveló un estudio del Instituto Datafolha, divulgado ayer.
En tanto, un informe del portal UOL, en base a informes de organismos de recaudación impositiva, da cuenta que el Gobierno central gastará unos 1.100 millones de reales (U$S 519 millones) en obras para construir los estados mundialistas, contradiciendo así a la presidenta, Dilma Rousseff, quien negó el viernes (en cadena nacional) que el Gobierno invierta recursos.
En cuanto al sondeo, que trabaja con un margen de error de cuatro puntos porcentuales, aquella mayoría de "paulistas" (dos de tres) está integrada por los sectores más escolarizados, los que tienen ingresos mensuales de entre cinco y diez salarios mínimos y los más acaudalados.
En contrapartida, el 34 por ciento que está en contra de que continúen las manifestaciones, que comenzaron en la capital paulista pero rápidamente se propagaron a todo el país, está integrado por los ciudadanos de mayor edad y los que tienen ingresos de hasta dos salarios mínimos. El haber mínimo nacional es de 678 reales (unos U$S 320).
Respecto de la violencia policial contra los manifestantes, que tuvo su punto crítico el jueves pasado en la tercera marcha contra el aumento de la tarifa del transporte público -hubo revueltas que se suceden en decenas de ciudades-, el 43% de los paulistas entiende que la Policía es más violenta de lo que debería.
El estudio de Datafolha, vinculado al diario "Folha de Sao Paulo", se realizó el jueves en la metrópolis en la que residen 11,38 millones de habitantes, según el último censo realizado en 2011.
Los gastos
Sobre el informe del portal UOL, de que los gastos llegarían a 1.100 millones de reales, choca con el discurso de la Presidenta pronunciado en medio de una ola de revueltas populares que sacuden al país. Los manifestantes critican los gastos excesivos en la organización del evento deportivo, en detrimento de inversiones para salud, vivienda y educación.
"Respecto del Mundial, quiero aclarar que el dinero del Gobierno federal, usado en los estadios, es fruto de financiamientos que serán debidamente pagados por las empresas y gobiernos que lo están gestionando", había remarcado Rousseff.
No obstante, cálculos del Tribunal de Cuentas de la Unión, citados por UOL, indican que sí existe inversión de recursos federales. Además, los préstamos que menciona Rousseff son del Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) con tasas de interés más bajas de lo normal, lo que supone que el banco estatal deja de ganar unos 189 millones de reales (unos U$S 89 millones) que podrían financiar otro tipo de proyectos.
Otro ejemplo dado por el medio que no coincide con lo afirmado por la Presidenta, es la financiación para la reconstrucción del estadio Mané Garrincha, en Brasilia.
Según UOL, el 49% de la reconstrucción del estadio más caro de los 12 mundialistas proviene de fondos del Estado, que invirtió 600 millones de reales (U$S 283 millones) en la reconstrucción. Según el Tribunal de Cuentas del Distrito Federal, el Mané Garrincha costó 1.700 millones de reales (U$S 802 millones).
En tanto, luego de 10 días de multitudinarias manifestaciones, las movilizaciones menguaron ayer considerablemente, aunque en varias ciudades, entre ellas Brasilia, San Pablo y Río de Janeiro se realizaron protestas y actividades que reunieron a miles de personas, con distintas demandas sociales al Gobierno de Rousseff. (DPA)
Ronaldo y Romario, en un duelo sin la pelota de por medio
Los ex campeones mundiales de fútbol brasileños Romario y Ronaldo intercambiaron críticas en relación con la ola de manifestaciones callejeras multitudinarias que, por diversas reivindicaciones, se registran Brasil en las últimas dos semanas.
La polémica fue iniciada por Ronaldo, quien el sábado afirmó que Romario -actual diputado federal por el Partido Socialista opositor- "debería actuar concretamente para lograr mejoras en estos momentos de creciente indignación popular". Insinuó, además, que Romario está aprovechando las protestas de los brasileños, en parte dirigidas a los elevados gastos del Gobierno para el Mundial, para llamar la atención de los medios con virulentos ataques al evento deportivo.
"Si alguien se está aprovechando de esta situación de indignación nacional, ciertamente no soy yo", escribió ayer Romario en su cuenta de Twitter.
Además, Romario divulgó en Facebook un texto titulado "Carta abierta a Ronaldo, mi camarada", en el que asegura que pidió 32.000 entradas de bajo precio para el mundial de fútbol que se jugará el año próximo en Brasil, para entregárselas a personas de escasos recursos.
"Como tú debes saber, estoy intentando instalar una comisión parlamentaria de investigación sobre la Confederación Brasileña de Fútbol para que podamos poner fin a los manejos de la institución y rescatar su verdadera función", indicó Romario. Agregó que está cumpliendo con su papel de fiscalizar los elevados gastos del Gobierno en la organización del Mundial de 2014.
Romario, quien jugó profesionalmente entre 1985 y 2009, integró el equipo brasileño que ganó el mundial de 1994, en EEUU, y fue designado como el mejor jugador de ese torneo.
Ronaldo, futbolista profesional entre 1993 y 2011, fue parte del seleccionado brasileño campeón del mundo en 2002, en Corea y Japón, del que fue máximo goleador. Actualmente es integrante del Comité Organizador del mundial del año próximo en Brasil.
Días atrás, Romario también polemizó con Pelé, considerado el mejor futbolista brasileño de todos los tiempos -y también campeón mundial en 1958, 1962 y 1970-, quien había exhortado a sus conciudadanos a no salir a las calles a protestar. (Télam)
Voces dispersas
Convocatoria para el martes.- El Movimiento Passe Livre (MPL), organizador de las primeras marchas callejeras en San Pablo contra el aumento de las tarifas del transporte público y que había anunciado que dejaría de llamar a movilizaciones tras los disturbios del jueves pasado en todo Brasil, convocó ayer a una nueva manifestación para el martes. En este caso, el motivo de la concentración será mostrar el apoyo a los movimientos que reclaman más inversión pública en la periferia de la mayor ciudad brasileña. El sábado, cientos de miles de brasileños volvieron a salir a las calles en al menos 107 ciudades, mientras que ayer se registraron unas pocas manifestaciones.
Esconde los problemas.- El presidente del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB, principal opositor), Aécio Neves, afirmó que el gobierno de Dilma Rousseff "esconde los problemas debajo de la alfombra" y actúa "sin transparencia". Neves sostuvo que con el mensaje al país que pronunció el viernes, Rousseff "escogió hacer un discurso que reproduce el tradicional estilo de hacer política en Brasil, empujando los problemas debajo de la alfombra".
Nueva cifra oficial.- La organización del Mundial 2014 en Brasil le generó hasta ahora al gobierno de ese país un gasto cercano a los 11.000 millones de euros, inferior en unos 2.000 millones a lo estimado originalmente. Así lo afirmó el director ejecutivo del Ministerio de Deportes, Luis Fernandes, según publicó el diario "O Estado de Sao Paulo".
Protesta en Copacabana.- Manifestantes colocaron el sábado 500 pelotas de fútbol en la playa de Copacabana, la más conocida de Río de Janeiro, donde protestaron contra los gastos del gobierno para la Copa del Mundo en 2014 y exigieron más presupuesto en salud, educación y seguridad.
En tanto, un informe del portal UOL, en base a informes de organismos de recaudación impositiva, da cuenta que el Gobierno central gastará unos 1.100 millones de reales (U$S 519 millones) en obras para construir los estados mundialistas, contradiciendo así a la presidenta, Dilma Rousseff, quien negó el viernes (en cadena nacional) que el Gobierno invierta recursos.
En cuanto al sondeo, que trabaja con un margen de error de cuatro puntos porcentuales, aquella mayoría de "paulistas" (dos de tres) está integrada por los sectores más escolarizados, los que tienen ingresos mensuales de entre cinco y diez salarios mínimos y los más acaudalados.
En contrapartida, el 34 por ciento que está en contra de que continúen las manifestaciones, que comenzaron en la capital paulista pero rápidamente se propagaron a todo el país, está integrado por los ciudadanos de mayor edad y los que tienen ingresos de hasta dos salarios mínimos. El haber mínimo nacional es de 678 reales (unos U$S 320).
Respecto de la violencia policial contra los manifestantes, que tuvo su punto crítico el jueves pasado en la tercera marcha contra el aumento de la tarifa del transporte público -hubo revueltas que se suceden en decenas de ciudades-, el 43% de los paulistas entiende que la Policía es más violenta de lo que debería.
El estudio de Datafolha, vinculado al diario "Folha de Sao Paulo", se realizó el jueves en la metrópolis en la que residen 11,38 millones de habitantes, según el último censo realizado en 2011.
Los gastos
Sobre el informe del portal UOL, de que los gastos llegarían a 1.100 millones de reales, choca con el discurso de la Presidenta pronunciado en medio de una ola de revueltas populares que sacuden al país. Los manifestantes critican los gastos excesivos en la organización del evento deportivo, en detrimento de inversiones para salud, vivienda y educación.
"Respecto del Mundial, quiero aclarar que el dinero del Gobierno federal, usado en los estadios, es fruto de financiamientos que serán debidamente pagados por las empresas y gobiernos que lo están gestionando", había remarcado Rousseff.
No obstante, cálculos del Tribunal de Cuentas de la Unión, citados por UOL, indican que sí existe inversión de recursos federales. Además, los préstamos que menciona Rousseff son del Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) con tasas de interés más bajas de lo normal, lo que supone que el banco estatal deja de ganar unos 189 millones de reales (unos U$S 89 millones) que podrían financiar otro tipo de proyectos.
Otro ejemplo dado por el medio que no coincide con lo afirmado por la Presidenta, es la financiación para la reconstrucción del estadio Mané Garrincha, en Brasilia.
Según UOL, el 49% de la reconstrucción del estadio más caro de los 12 mundialistas proviene de fondos del Estado, que invirtió 600 millones de reales (U$S 283 millones) en la reconstrucción. Según el Tribunal de Cuentas del Distrito Federal, el Mané Garrincha costó 1.700 millones de reales (U$S 802 millones).
En tanto, luego de 10 días de multitudinarias manifestaciones, las movilizaciones menguaron ayer considerablemente, aunque en varias ciudades, entre ellas Brasilia, San Pablo y Río de Janeiro se realizaron protestas y actividades que reunieron a miles de personas, con distintas demandas sociales al Gobierno de Rousseff. (DPA)
Ronaldo y Romario, en un duelo sin la pelota de por medio
Los ex campeones mundiales de fútbol brasileños Romario y Ronaldo intercambiaron críticas en relación con la ola de manifestaciones callejeras multitudinarias que, por diversas reivindicaciones, se registran Brasil en las últimas dos semanas.
La polémica fue iniciada por Ronaldo, quien el sábado afirmó que Romario -actual diputado federal por el Partido Socialista opositor- "debería actuar concretamente para lograr mejoras en estos momentos de creciente indignación popular". Insinuó, además, que Romario está aprovechando las protestas de los brasileños, en parte dirigidas a los elevados gastos del Gobierno para el Mundial, para llamar la atención de los medios con virulentos ataques al evento deportivo.
"Si alguien se está aprovechando de esta situación de indignación nacional, ciertamente no soy yo", escribió ayer Romario en su cuenta de Twitter.
Además, Romario divulgó en Facebook un texto titulado "Carta abierta a Ronaldo, mi camarada", en el que asegura que pidió 32.000 entradas de bajo precio para el mundial de fútbol que se jugará el año próximo en Brasil, para entregárselas a personas de escasos recursos.
"Como tú debes saber, estoy intentando instalar una comisión parlamentaria de investigación sobre la Confederación Brasileña de Fútbol para que podamos poner fin a los manejos de la institución y rescatar su verdadera función", indicó Romario. Agregó que está cumpliendo con su papel de fiscalizar los elevados gastos del Gobierno en la organización del Mundial de 2014.
Romario, quien jugó profesionalmente entre 1985 y 2009, integró el equipo brasileño que ganó el mundial de 1994, en EEUU, y fue designado como el mejor jugador de ese torneo.
Ronaldo, futbolista profesional entre 1993 y 2011, fue parte del seleccionado brasileño campeón del mundo en 2002, en Corea y Japón, del que fue máximo goleador. Actualmente es integrante del Comité Organizador del mundial del año próximo en Brasil.
Días atrás, Romario también polemizó con Pelé, considerado el mejor futbolista brasileño de todos los tiempos -y también campeón mundial en 1958, 1962 y 1970-, quien había exhortado a sus conciudadanos a no salir a las calles a protestar. (Télam)
Voces dispersas
Convocatoria para el martes.- El Movimiento Passe Livre (MPL), organizador de las primeras marchas callejeras en San Pablo contra el aumento de las tarifas del transporte público y que había anunciado que dejaría de llamar a movilizaciones tras los disturbios del jueves pasado en todo Brasil, convocó ayer a una nueva manifestación para el martes. En este caso, el motivo de la concentración será mostrar el apoyo a los movimientos que reclaman más inversión pública en la periferia de la mayor ciudad brasileña. El sábado, cientos de miles de brasileños volvieron a salir a las calles en al menos 107 ciudades, mientras que ayer se registraron unas pocas manifestaciones.
Esconde los problemas.- El presidente del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB, principal opositor), Aécio Neves, afirmó que el gobierno de Dilma Rousseff "esconde los problemas debajo de la alfombra" y actúa "sin transparencia". Neves sostuvo que con el mensaje al país que pronunció el viernes, Rousseff "escogió hacer un discurso que reproduce el tradicional estilo de hacer política en Brasil, empujando los problemas debajo de la alfombra".
Nueva cifra oficial.- La organización del Mundial 2014 en Brasil le generó hasta ahora al gobierno de ese país un gasto cercano a los 11.000 millones de euros, inferior en unos 2.000 millones a lo estimado originalmente. Así lo afirmó el director ejecutivo del Ministerio de Deportes, Luis Fernandes, según publicó el diario "O Estado de Sao Paulo".
Protesta en Copacabana.- Manifestantes colocaron el sábado 500 pelotas de fútbol en la playa de Copacabana, la más conocida de Río de Janeiro, donde protestaron contra los gastos del gobierno para la Copa del Mundo en 2014 y exigieron más presupuesto en salud, educación y seguridad.